Palacio Quintanar, centro de innovación y desarrollo para el diseño y la cultura, de la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León, acoge la exposición ‘Esto no es un cartel’ del diseñador y ilustrador Isidro Ferrer, Premio Nacional de Diseño (2002) y Premio Nacional de Ilustración(2006). La exposición permite entrar en el universo de un diseñador de referencia, reafirmar el valor estético, comunicativo y cultural del cartel y a la vez, recorrer varias temporadas del Centro Dramático Nacional que ha dejado grabadas en sus ilustraciones el también actor Isidro Ferrer.
La exposición reúne una selección de 170 carteles, alrededor de un centenar de esculturas y varios cuadernos del artista que, en conjunto, componen una muestra del desarrollo creativo del autor a lo largo de veinte años.
Todas las piezas cuentan con la impronta inconfundible de Isidro Ferrer, caracterizada por una aparente sencillez, en la que los objetos y figuras iluminan nuevos significados mediante la combinación de elementos y sutiles modificaciones resultado de un hondo proceso de reflexión intelectual en el que participan recursos del arte y la literatura. Así fue puesto de manifiesto ayer por el director del Palacio Quintanar de Segovia, Giovanni Ferraro, en la presentación ante los medios de comunicación de la exposición con la que comienza el curso expositivo 2020 del centro de innovación y desarrollo para el diseño y la cultura.
En el acto de presentación también intervino el director general de la Fundación Siglo para el Turismo y las Artes de Castilla y León, Juan González-Posada; el delegado territorial de la Junta en Segovia, José Mazarías Pérez y el propio autor de la exposición ‘Esto no es un cartel’, que puede visitarse hasta el día 19 de abril de 2020 en el Palacio Quintanar de Segovia.
Isidro Ferrer, que ha seguido la actividad expositiva de Palacio Quintanar, confesó que guardaba el deseo de mostrar su obra en este centro y que llegada la ocasión ha adecuado la presentación de su trabajo a las salas de este “edificio singular”.
El director general de la Fundación Siglo elogió el sello de Isidro Ferrer y la iniciativa del ‘Quintanar’ para producir esta exposición antológica. Juan González-Posada considera que, después del público del centro segoviano, ‘Esto no es un cartel’ debe llevarse al encuentro de amantes de la cultura y el arte de otras ciudades de Castilla y León. “Vamos a ver la posibilidad de que esta exposición se lleve a otros centros culturales de la Comunidad”, comentó Juan González-Posada. La Fundación Siglo, según explicó su director, no quiere que las producciones “nazcan y mueran” en un solo centro sino que se distribuyan por otros de la Comunidad.
Isidro Ferrer (Madrid, 1963), es una de las figuras de referencia del cartel cultural europeo. Graduado en Arte Dramático y Escenografía, actúo para diversas compañías teatrales durante los años 80, descubre su vocación en la comunicación gráfica durante la rehabilitación tras un accidente. Su trayectoria profesional como diseñador gráfico e ilustrador comienza en 1988 en el El Heraldo de Aragón. Un año después, continúa su formación en el estudio del diseñador gráfico Peret, en Barcelona, y crea, en Zaragoza, el Estudio Camaleón, con el que comienza a conseguir diversos premios. Sus trabajos como diseñador, cartelista e ilustrador para el Centro Dramático Nacional, así como para diversas editoriales (Alfaguara y Santillana) y grupos de comunicación forman parte del imaginario colectivo.
Críticas veladas por el ‘éxito’ cultural
El delegado territorial de la Junta, José Mazarías, en su discurso de apertura de la exposición ‘Esto no es un cartel’, destacó las aportaciones que hacen los centros de la Administración autonómica a la vida cultural segoviana. En un movimiento a la defensiva, Mazarías declaró que “frente a determinadas voces que pretenden excluir a la Junta de Castilla y León de la vida cultural en Segovia, y en concreto del ‘éxito’ de dicha vida cultural, tenemos que reafirmar el carácter insustituible de los centros culturales de titularidad autonómica y su aportación a dicho éxito”. El delegado territorial atribuye el valor de esta aportación a “los profesionales que gestionan estos centros” y a “la ejecución de las políticas culturales del gobierno de la Junta de Castilla y León”.
