Un gran revuelo se hizo en la mañana de ayer dueño y señor del salón de plenos de la Diputación. Como todos los años, desde hace ya 21, un día del mes de enero se entregan los premios del concurso provincial de belenes. Y hasta Segovia se desplazaron un buen número de los belenistas galardonados, algunos de ellos llegados desde los puntos de la provincia más alejados a la capital, como Ayllón, Remondo o Gomeznarro. El salón de actos fue, por tanto, un hervidero, en el que mientras algunos profesores intentaban controlar a sus alumnos, los adultos se preguntaban unos a otros qué premio habían obtenido las asociaciones a las que pertenecen…
El medio del barullo, el presidente de la Diputación, Javier Santamaría, estaba contento. Los números que presentaba eran como para estarlo. En el vigésimo primer concurso han participado 71 belenes, superando el récord establecido el año pasado (67). De los colectivos participantes, 41 se inscribieron en la categoría popular, 24 en la escolar y 6 en la de exhibición.
Santamaría agradeció a todos los participantes el mantenimiento de una “tradición arraigada”, al tiempo que insistió en que la elaboración de un belén es una excusa para salir de casa y dialogar con el vecino.
Un total de 51 belenes recibieron premio. Los dos más importantes, los de la fase provincial, fueron, en la categoría popular, para la asociación juvenil “Los Cinco Caños”, de Coca, que se llevó 800 euros, y en la categoría escolar, para el CEIP “Las Cañadas”, de Trescasas, cuyo belén le ha reportado 400 euros y un lote de premios.
Además, también se distribuyeron los premios comarcales, de las cuatro zonas en la que estaba dividida la provincia (Cantalejo, Cuéllar, Prádena y San Ildefonso —localidades en las que se ubican los CEAAS—) y, finalmente, los premios para los belenes de “exhibición”.
Al final, todos y todas se marcharon satisfechos de la Diputación, y más de un grupo de premiados convirtió el viaje a Segovia en una excursión invernal.