La Gimnástica Segoviana afronta una semana complicada por la derrota frente al Real Ávila, que siempre duele un poco más que una ‘normal’, los dos días de descanso por las fiestas de Nochevieja y Año Nuevo, y el partido de sábado ante el Numancia B, un oponente más que cualificado, con futbolistas muy desequilibrantes en el uno contra uno.
Pero la actualidad del equipo gimnástico va más allá del partido, con dos frentes abiertos. El primero de ellos tiene que ver con la expulsión de Manu González frente al Ávila, con la consiguiente sanción de dos partidos que le ha impuesto el Comité de Competición, y que ha provocado un buen enfado en el técnico, que considera que la redacción del acta no es cierta: “y he mandado el vídeo de mi expulsión a la directiva por si quieren presentar recurso. En el acta el árbitro dice que me expulsa por protestar de manera airada y pegando gritos con los brazos en alto, y se ve perfectamente que yo no hago eso, sino que tengo una mano en el bolsillo, y con la otra señalo donde se produce la avalancha”, tras el segundo gol marcado por el conjunto encarnado.
NO PROSPERARÁ
Pese a que se presentará el recurso, el técnico considera que tiene pocas opciones de prosperar, “esto es así, y ya se vio el año pasado con la expulsión de Mika ante el Júpiter Leonés, que se demostró en un vídeo que no era nada pero que no sirvió, con lo que la única solución que hay es callarse. Intentaré a partir de ahora hablar solo con los jugadores, a los que pedí perdón en el vestuario por la expulsión”.
Pero una cosa es pedir perdón a la plantilla, y otra muy distinta dejar de pensar lo que Manu sigue pensando de las actuaciones arbitrales: “Volvemos a lo de siempre. Los árbitros son los que tienen la sartén por el mango, y nunca son sancionados. Yo a Javi Borrego puedo dejarle sin jugar el próximo día por un castigo, a mí me van a castigar dos partidos por no hacer nada, y el árbitro este fin de semana pitará, al siguiente también, y no pasará nada, porque no hay ningún juez que les examine a ellos, que les sancionen cuando lo hacen mal. No hay nada que hacer, el nivel es el que es, y mientras ellos tengan todo el poder, lo único que podemos hacer es callarnos
LAS LLEGADAS, SI LAS HAY
El segundo de los frentes abiertos de la Segoviana tiene que ver con la llegada de algún refuerzo de cara a la segunda vuelta, teniendo en cuenta que la marcha de Domingo ha dejado la plantilla en diecisiete jugadores. Pero Manu considera que hay que hilar fino en este tema, “porque el acierto de cara al gol se paga, y nosotros no tenemos dinero”.
Además, el entrenador puso como ejemplo el de Mika, “al que podríamos traer esta misma temporada, pero con el que cortaríamos la progresión de jugadores como Diego Gómez o Dani Abad, que nos cuestan menos dinero y que a la larga nos pueden dar muchas alegrías”, y aseguró que el cántabro no jugará en la Segoviana esta temporada.
“Hay que apostar por lo que tenemos, aunque sería lógico que al tener una baja deberíamos firmar una incorporación, pero debemos mirar mucho qué clase de jugador necesitamos, si para una posición específica o algo más polivalente, porque solo tenemos un lateral por cada banda, y porque no contamos con ese centrocampista de fuerza y potencia en el juego aéreo como era Domingo. Nos hemos quedado con el talento”.
