Aunque ayer por la tarde, el ministro de Fomento y portavoz del Gobierno, José Blanco, volviese a insistir en su inocencia y en la falsedad de las acusaciones contra él, el revés que le recetó la Justicia por la mañana fue importante: la jueza instructora del caso Campeón, Estela San José, remitió al Tribunal Supremo el testimonio de las actuaciones en las que figura el socialista, al que el principal imputado en esta causa, el empresario Jorge Dorribo, acusa de cobrar comisiones irregulares.
Según las fuentes del Alto Tribunal, de momento, no se puede precisar si se trata de un mero traslado al Supremo de esa parte del sumario, declarado secreto, por tratarse Blanco de un aforado, o si lo que ha elevado la magistrada es una exposición razonada ante posibles indicios de delito presuntamente cometidos por el ministro. Sin embargo, en cualquiera de los casos, la Justicia considera que hay indicios de la implicación del socialista en el caso, lo cual deja a Blanco en una situación complicada en plena campaña electoral.
Esta noticia se produce, además, apenas unos días después de que un diario nacional filtrase que el empresario Jorge Dorribo, propietario de la farmacéutica Nupel, acusó en su declaración al titular de Fomento de haber percibido comisiones ilegales a cambio de favores.
Tras conocerse la decisión de la jueza gallega, la portavoz parlamentaria del PP, Soraya Sáenz de Santamaría, aseveró que ahora es más clara la exigencia de dimisión. Además, la popular señaló que crece la responsabilidad de dos personas: el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, que le mantiene como ministro y portavoz, y el candidato Alfredo Pérez Rubalcaba, que le permite ir de cabeza de lista.
Por su parte, el portavoz de Justicia de los conservadores, Federico Trillo, aseguró que la doctrina del Tribunal Supremo «exige que existan indicios de criminalidad para que le remitan un asunto», e instó al fiscal general del Estado, Cándido Conde Pumpido, a que «no interfiera» en la admisión a trámite y deje decidir al Supremo.
Sin embargo, a pesar de las palabras de los populares y de la decisión judicial, Blanco subrayó que tiene «el máximo interés» en que estas «falsas imputaciones» se investiguen «lo más rápidamente posible» e insistió en que está «en condiciones de demostrar su inocencia ante quien sea».
Mientras, el presidente del Congreso, José Bono, aseguró que «la inmensa mayoría de los españoles cree antes a un ministro de España, sea de cualquier partido político, que a un delincuente» en alusión a las acusaciones del empresario Jorge Dorribo.
