Los ministros de Economía de la eurozona rechazaron en el día de ayer la prórroga de un mes del rescate que había pedido el Gobierno griego para dar tiempo al referéndum del 5 de julio y decidieron celebrar a continuación un segundo encuentro, al que no invitaron al ministro de Finanzas heleno, Yanis Varoufakis, para discutir un “plan B” sobre Grecia, es decir, cómo gestionar su posible suspensión de pagos y salida del euro.
La primera parte del Eurogrupo, en presencia de todos los ministros, duró alrededor de tres horas, tras las que los ministros aprovaron una breve declaración sobre Grecia que no ha sido suscrita por Varoufakis. A continuación, hubo varias ruedas de prensa por separado del presidente, Jeroen Dijsselbloem, y del propio ministro de Finanzas heleno. Varoufakis abandonó entonces el edificio mientras el resto de ministros continuaban las discusiones.
En su declaración, el Eurogrupo lamenta que Atenas rechazará la última oferta de la troika en materia de ajustes y reformas y haya roto las negociaciones sobre el rescate con la convocatoria del referéndum. Y deja claro que, debido a ello, “el actual acuerdo de asistencia financiera con Grecia expirará el 30 de junio de 2015”, lo que significa que Atenas dejará de tener acceso a fondos de la UE.
“Las autoridades griegas habían pedido una prórroga de un mes. Pero durante ese mes no puede haber desembolsos, el programa (de rescate) no está encarrilado, ¿cómo puede el Gobierno griego pensar que sobrevivirá y afrontará sus problemas en ese periodo?”, señaló el presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem.
Incluso en el caso de que ganara el sí en el referéndum y el Gobierno de Syriza cumpliera su compromiso de aplicar las exigencias de la troika, el Eurogrupo considera que tendría “poca credibilidad” después de haber hablado de ellas “de forma tan negativa”, explicó Dijsselbloem. Y si ganara el no, las posibilidades de mejorar la oferta de los acreedores son muy limitadas.
El presidente del Eurogrupo eludió aclarar si el final del programa de rescate griego significa que el Banco Central Europeo (BCE) cortará también la línea de liquidez de emergencia que mantiene viva a la banca griega. “Es una cuestión que el consejo de gobierno del BCE debe examinar y responder, no puedo intervenir, son independientes”, dijo.
Dijsselbloem aseguró que, pase lo que pase, Grecia seguirá estando obligada a pagar sus deudas. “Es responsabilidad del Gobierno griego, en cualquier situación, cumplir sus obligaciones” y “eso no va a desaparecer”, sostuvó el presidente del Eurogrupo, que recordó que la eurozona “ha dado un gran apoyo financiero a Grecia a tipos y vencimientos cada vez más favorables”.
En su declaración, los ministros de Economía lamentan que “pese a los esfuerzos a todos los niveles y el pleno apoyo” de la UE, Grecia rechazó la última propuesta de los acreedores en materia de ajustes y reformas y ha roto las negociaciones «de forma unilateral».
La declaración del Eurogrupo subraya la gran capacidad de que “las autoridades de la eurozona están dispuestas a hacer todo lo que sea necesario para garantizar la estabilidad financiera de la eurozona”, dijo el mandatario que comparece ante la prensa en el preludio de la salida de Grecia de la Eurozona.
