Un fallo fortuito en uno de los grupos de bombeo que se están empleando en las obras de consolidación del colector del Clamores en el barrio de San Millán ocasionó ayer una inundación en la Plaza del Doctor Gila, donde el agua procedente del colector llegó a cubrir la superficie del recinto hasta una altura de diez centímetros.
El suceso ocurrió pasadas las tres y media de la tarde, cuando el grupo electrógeno que suministra energía a una de las máquinas de bombeo instaladas en la Plaza del Doctor Gila quedó conectado mientras los trabajadores de la obra paraban en su actividad para la comida, según explicó el concejal de obras Miguel Merino en declaraciones al diario digital Acueducto2.
Así, la manguera instalada para canalizar el agua procedente del colector saltó y provocó la fuga de agua, cuyo volumen originó la rápida inundación de todo el entorno. Hasta el lugar se desplazó una unidad del cuerpo de Bomberos, que consiguió resolver la situación sin mayores problemas, aunque la retirada del agua y la limpieza de la plaza se prolongó hasta casi las siete de la tarde.
El testimonio de algunos vecinos de la zona precisa que el agua vertido en la plaza se acumuló “en muy poco tiempo”, generando no sólo la inundación, sino un fuerte mal olor ya que procede del sistema de canalización de aguas fecales que ahora se está reparando tras el hundimiento registrado en la plaza de Aurelio Fernández tras la fuerte tormenta registrada el 26 de agosto que dañó serios daños en el colector del Clamores.
