Una semana más, el ambiente del Naturpellet Segovia ha girado en torno a los asuntos extradeportivos. Los casi tres meses sin cobrar que lleva la plantilla, unida a la marcha del argentino Nico Rolón, copó los focos en un tramo de temporada vital para mantener la categoría. Quedan tres jornadas para el final y el cuadro blanquirrojo tiene hoy una final por la permanencia. El conjunto de Diego Gacimartín se mide al colista, la UMA Antequera, en el pabellón Fernando Argüelles (20.45 horas). Si gana el plantel segoviano, los malagueños quedarían automáticamente descendidos, pues disponen de 11 puntos, y acabaría así con un rival directo. Los de Segovia se encuentran a dos puntos de reducir la franja con la salvación (17), siendo el Valdepeñas el que está por encima (19) y después el O Parrulo Ferrol, que es el que más fácil lo tiene en principio (23).
Pese a las dificultades que la campaña está entrañando, los jugadores mantienen su compromiso con la ciudad y la afición, tal y como recalcaron en la rueda de prensa que convocaron el miércoles y como han demostrado a lo largo del curso. La plantilla ya se encuentra en tierras andaluzas con una lista definida por todos los integrantes y con la duda del guardameta Alberto Sanz, que todavía se encuentra recuperándose de su esguince de rodilla. La marcha de Rolón, que supuso la tercera en cuanto a jugadores tras las salidas de Pedro Henrique dos Santos ‘Pedrinho’ y Álvaro Quevedo ‘Alvarito’, obliga a Gacimartín a completar la convocatoria con el juvenil Monir Louah.
Este encuentro llega con el antecedente del empate en la primera vuelta (2-2) y la controversia que suscito el fichaje de Alvarito por el propio Antequera. Asimismo, el equipo que hoy ejerce como local lleva seis partidos sin conocer la victoria, sumando solo un empate ante el Ribera Navarra (3-3), mientras que los visitantes vienen de caer por la mínima frente al Santa Coloma (1-2) y ganar anteriormente en Ferrol (3-4) en un triunfo que supuso un golpe moral.
