El alto cargo del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) Cemil Bayik, uno de los fundadores de la formación, pidió esta semana a Estados Unidos que medie en las negociaciones con Turquía, reconociendo además la existencia de conversaciones secretas con Washington.
En una entrevista concedida al diario británico ‘The Telegraph’, Bayik rechazó la idea de un alto el fuego unilateral en los actuales enfrentamientos con las fuerzas de seguridad, que se saldaron con la muerte de 20 policías y soldados y varios centenares de milicianos.
Pese a ello, aseguró que el grupo aceptaría un alto el fuego que contara con las garantías de Estados Unidos. “Hay mensajes, encuentros, cartas, que podrían desarrollarse más”, dijo sobre el conflicto entre los milicianos kurdos y Turquía que se desarrolla tanto en territorio turco como en Irak y Siria.
“Reitero mi llamamiento a que Estados Unidos medie en la situación entre nosotros y Turquía. Si nos dan garantías, aceptamos el papel. Si no hay garantías, no podemos dar pasos unilaterales”, recalcó Bayik.
El reinicio de los enfrentamientos entre Turquía y el PKK dificultó las tareas de la coalición que encabeza Estados Unidos contra el grupo yihadista Estado Islámico, ya que el grupo kurdo es uno de los que combaten contra la formación extremista en Irak y Siria.
Por ello, Bayik destacó que Estados Unidos se encuentra en la actualidad en una buena situación para intervenir en el conflicto para evitar que la violencia se recrudezca.
Así, defendió que el papel del PKK en la lucha contra el Estado Islámico permitió que la opinión internacional deje de verlo como un grupo terrorista, como lo consideraban Turquía, Estados Unidos y otros países europeos, y pase a verlo como un defensor de la democracia, la libertad y los derechos de las mujeres.
“Si Estados Unidos sigue respaldando las políticas de Turquía es posible que pierda a los kurdos. Si Estados Unidos pierde a los kurdos, será difícil derrotar al Estado Islámico”, advirtió.
Por otra parte, Bayik acusó al presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, de actuar contra el proceso de paz llevado a cabo durante dos años por motivos electorales tras perder su mayoría en las elecciones parlamentarias de junio. “Erdogan está profundizando la crisis en Turquía al tiempo que profundiza la crisis en Oriente Próximo”, sostuvo.
Asimismo, dijo que las condiciones del PKK para el inicio de nuevas negociaciones son el fin de la campaña de bombardeos contra sus posiciones en Turquía e Irak y que se permita el acceso al líder del grupo, Abdulá Ocalan. Por último, Bayik reclamó el fin de las “operaciones policiales”, en referencia a los centenares de arrestos de activistas kurdos en territorio turco.
