La Residencia El Alamillo ha vivido unos días intensos en torno al cumpleaños de una de sus usuarias más longevas, Margarita Medina. El pasado día 16 de enero cumplió 100 años, pero lo hizo en el hospital, así que la celebración se pospuso y se hizo por todo lo alto este pasado fin de semana. Alrededor de 30 años en la Residencia El Alamillo dan para mucho, y sus compañeros, el párroco y su extensa familia quiso agradecer una vida dedicada a ellos; en nombre delo Ayuntamiento, la concejal de Asuntos Sociales le hizo entrega de un ramo de flores y un obsequio. Margarita mostró su pasión por la costura durante estos 30 años, y así lo corrobora una exposición en la residencia, donde se pueden ver cojines, fundas, bolsas o manteles realizadas con muchísimo cariño. Margarita sopló las velas con sus compañeros y familia: hijos, nietos y bisnietos. Tanto uno de sus hijos como la directora del centro recalcaron la plenitud con la que ha vivido en la residencia, cuánto servicio ha prestado a sus compañeros y la felicidad que la ha llevado a cumplir los 100.
