El bar Santana, situado en la calle Infanta Isabel, 18 — más conocida como la calle de los bares para los segovianos— acoge hasta el próximo día 17 de enero la exposición del arandino Toni Marmota.
“Siempre he estado muy metido en el mundo del cómic, de hecho llevo en él desde los 16 años”, comenta el artista añadiendo que, desde hace dos años que viajó a Méjico para decorar el interior del Nirvana Hostel con habitaciones dedicadas a Warhol o Picasso, por ejemplo, se ha acostumbrado a trabajar y pintar en formatos de mayor tamaño. Otro ámbito del trabajo de Marmota es el street-art, tan de moda en los últimos tiempos.
En este sentido, las obras que se encuentran expuestas en el Santana son grandes creaciones —de un tamaño más considerable que las viñetas de cómic habituales — en las que Marmota representa la música, las motos, el surf y el vino, importantes pilares de su vida, según cuenta. “Además, aparecen calaveras mejicanas pero desde un punto de vista más abstracto, que es con el estilo que yo trabajo”, afirma el artista.
En estos últimos dos años, el arandino ha elaborado alrededor de 120 pinturas y, por la amistad que le une a los hermanos Santana, ha encontrado en el conocido bar segoviano un lugar idóneo en el que mostrar una parte de su obra.
“Desde que se inauguró la muestra el pasado jueves, 3 de enero, varias personas han reservado cuadros”, confirma Marmota. Y es que, además de para darse a conocer, la exposición permite adquirir las creaciones, como ocurre que en cualquier galería de arte. Así, los lienzos de mayor tamaño, de 70×100 centímetros, tienen un precio de 250 euros y los más pequeños, 150 euros.
