El vicerrector de la Universidad de Valladolid, Juan José Garcillán, hizo entrega ayer del proyecto definitivo de la segunda fase de construcción del campus María Zambrano a la alcaldesa Clara Luquero en la Concejalía de Urbanismo, Vivienda y Rehabilitación. Clara Luquero recibió las cajas con la documentación como un esperado “regalo de Reyes para la ciudad y para la Universidad”.
El acto de entrega, además de ser un trámite necesario para solicitar la tira de cuerdas, la licencia ambiental y la licencia de obra a la Concejalía de Urbanismo, escenificó el último avance dado hacia la consecución de un campus público completo para la provincia de Segovia. Tanto Juan José Garcillán como Clara Luquero resaltaron el trabajo conjunto de las instituciones en pro de este proyecto. “Estamos todos a una en el intento de acabar las obras cuanto antes”, señaló Clara Luquero, acompañada por el concejal de Economía y Urbanismo, Alfonso Reguera, y por la concejala de Obras, Servicios e Infraestructuras, Paloma Maroto. “Después de tanto tiempo de espera hoy es un día importantísimo para la Universidad, para el campus María Zambrano y para la ciudad”, destacó la alcaldesa. En sus declaraciones Clara Luquero no precisó el tiempo que llevará la tramitación de las licencias municipales “porque hay mucha documentación que tienen que ver los arquitectos y los técnicos”, pero aseguró que se van a poner “inmediatamente con ello” y a “trabajar intensamente”. Durante los meses de verano los arquitectos José Ignacio Linazasoro y Ricardo Sánchez, autores del proyecto, han mantenido reuniones con los técnicos municipales para ajustar el diseño a la normativa de la ciudad y “evitar demoras innecesarias y que vaya todo ágil”, comentó Clara Luquero.
Para el vicerrector del campus de Segovia, Juan José Garcillán, la presentación del proyecto definitivo en el Ayuntamiento “constata que los plazos se están cumpliendo y que hay una clara voluntad por parte de todos los agentes implicados en el proceso de llevarlo adelante”.
Juan José Garcillán confirmó que, tal y como había avanzado este diario, el pliego de condiciones para la adjudicación de las obras se publicará “a la vuelta de las vacaciones de Navidad”, con un plazo de 40 días para la presentación de las propuestas. Se abrirá después un período de estudio y análisis “para buscar la mejor oferta” que puede durar entre tres y cuatro meses, dependiendo del número de empresas aspirantes a la adjudicación. “La estimación es empezar las obras en el mes de abril o principios de mayo”, indicó el vicerrector reiterando que la Universidad de Valladolid confía en poner en uso las nuevas instalaciones durante el curso 2017/2018”.
Juan José Garcillán aseguró que con la ejecución de la segunda fase de obras acabará la intervención que corresponde a la UVa pero recordó ante la alcaldesa que quedaría pendiente la que se ha venido llamando “tercera fase del campus” que consiste en la creación de dotaciones municipales en la zona, destinadas a los universitarios. Según expuso el vicerrector, la comunidad del campus María Zambrano “anhela y desea” que de forma paralela a la ejecución de las obras ahora en trámite, se avance en el proyecto de desarrollo del entorno del antiguo Regimiento con la creación de una residencia para estudiantes y espacios para practicar deportes. “Contamos con el Ayuntamiento para crear esos servicios añadidos que no hemos podido incluir en la segunda fase por impedimento de espacio y de presupuesto”, señaló el representante de la Universidad de Valladolid. “No son imprescindibles para la actividad docente e investigadora —añadió— pero son buenos para la vida universitaria”.
La alcaldesa mostró la voluntad del Ayuntamiento de llevar a cabo este proyecto pero apuntó que “necesitamos más plazo porque nosotros vamos a tardar un par de años en tener ese espacio a disposición”.
Hay que recordar que el pasado mes de septiembre se firmó la adenda al convenio entre el Ayuntamiento de Segovia y el Ministerio de Defensa, en la sede del INVIED, por el que el municipio recibirá 8.645 metros cuadrados edificables, parte —5.645 metros— en terrenos del solar del antiguo Acuartelamiento ‘Leones de Castilla’, conocido en Segovia como el Regimiento, y parte —3.000 metros cuadrados— en el inmueble conocido como Casa Quemada, con los que está previsto, entre otros fines, potenciar el desarrollo de la vida universitaria.
Las obras de la segunda fase del campus serán financiadas por la Junta de Castilla y León, con 7,5 millones de euros, y por la Universidad de Valladolid, con 3 tres millones. Para el año 2016 cuentan con una dotación de 2,5 millones de los presupuestos de la Junta y de 1,3 millones de inversión directa de la UVa.
