El Gremio Artesanal Segoviano ha hecho este año una apuesta muy fuerte para salvar la Feria Nacional de Artesanía de los crueles efectos de la crisis y ha redoblado esfuerzos para conseguir celebrar su trigésimo segunda edición manteniendo el sello de calidad que la ha convertido en un prestigioso escaparate nacional donde los talleres presentan sus últimas creaciones.
Una de las medidas adoptadas ha sido incrementar la presencia de expositores hasta superar el medio centenar.
La XXXII Feria Nacional de Artesanía de Segovia se celebrará entre el día 28 de abril y el 2 de mayo, ambos incluidos, en la avenida Fernández Ladreda con la presencia de 54 artesanos. En el montaje que en las próximas horas comenzará a instalarse en las proximidades del Acueducto habrá 52 puestos que serán ocupados por talleres de toda España que traen sus obras para ser vendidas, y un área de exposición con obras de las ganadoras del certamen de Pieza Única de 2011, Lola Royo y Begoña Ordaz. Al igual que ocurrió el pasado año, el Gremio Artesanal Segoviano ha optado por unificar el espacio de venta y el de exposición de Pieza Única, para no dispersar y perder público. De forma paralela, el colectivo organizador de la feria intenta mostrar dos caras del trabajo artesanal, la producción más creativa, selecta y arriesgada, junto al trabajo más cotidiano y próximo al gran público.
En todo caso, el área artística contará con una decoración especial para resaltar el trabajo de la ceramista Lola Royo, que el pasado año ganó el concurso con la obra “Contenedor de cuentos”, una pieza de mueble reciclado que combina acrílico, collage y cerámica, y de Begoña Ordaz que consiguió el segundo puesto con el conjunto textil “Deshielo”.
La feria ofrecerá productos artesanales en cerámica, alfarería tradicional, madera, joyería, textil, vidrio y otras especialidades minoritarias como joyas de papel, cosmética ecológica, grabados, títeres o velas. Cuero y joyería dominarán en la nueva edición de la feria nacional, acaparando cerca del cincuenta por ciento de los expositores.
La organización de la muestra ha procurado ser más “permisiva” para que, sin hacer peligrosas concesiones, dar cabida a más artesanos y a sectores especialmente atractivos para el público con el fin de promocionar la artesanía, mejorar las ventas y capear la crisis. “Hemos sido siempre muy rígidos y estrictos, pidiendo calidad extrema, pero en estos tiempos no podemos ser pacatos y hay que aprovechar bien el espacio que tenemos en la feria”, ha explicado el maestro mayor del Gremio Artesanal de Segovia, Jesús de la Cruz.
El Gremio espera que el público de la provincia y de la capital mantenga firme su fiel respuesta a esta actividad económica y cultural y también pretende atraer a los visitantes madrileños que aprovechando las jornadas festivas del 1 y 2 de mayo, —Día del trabajador Día de la Comunidad de Madrid, respectivamente— se trasladen a hacer turismo a Segovia. Los artesanos recuerdan que sus obras son una buena alternativa para cumplir con la tradición de agasajar a las mamás el primer domingo del mes de mayo (Día de la Madre).
Horario partido
Los ajustes de presupuesto que ha tenido que hacer el Gremio Artesanal para sacar adelante la feria, a pesar de perder importantes patrocinadores, han provocado algunos cambios organizativos. Este año el horario de atención al público quedará interrumpido en las primeras horas de la tarde. Jesús de la Cruz ha explicado que “no podemos pagar al personal que se hacía cargo de atender las visitas mientras los artesanos se ausentaban para comer, y es una pena porque entre las tres y las cuatro de la tarde se acercaban a los expositores muchos turistas”. De forma que los expositores estarán abiertos desde las once de la mañana hasta las dos y media de la tarde y reabrirán de cinco de la tarde a nueve y media de la noche.
Los recortes económicos también llevan a suspender la convocatoria del concurso de Pieza Única y a prescindir de la organización de talleres en vivo. “Este año hacemos feria pura y dura” ha declarado el maestro mayor del gremio explicando que “éste es el precio de la crisis”, pero anunciando la intención de recuperar estas actividades en futuras ediciones.
