El presidente del PP de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco (Salamanca, 1965), tiene como próximo reto lograr la Presidencia de la Junta de Castilla y León. Pero además, el también alcalde de Salamanca, se enfrenta a la dura tarea de conseguir los mejores candidatos para las ciudades y pueblos de la región. Conoce la administración local y regional, pues ha sido concejal, procurador, presidente de la Diputación charra, y consejero de Presidencia y Administración Territorial, y de Justicia e Interior. Consciente de que cada vez es más complicado lograr la mayoría absoluta con la que el PP ha gobernado durante muchos años, aún así aspira a que Castilla y León y los municipios tengan gobiernos con estables.
—Pregunta ¿Resulta tarea sencilla compaginar la labor de alcalde de una ciudad con la Presidencia de un partido en estas fechas próximas a las elecciones?
Respuesta— La vedad es que estoy haciendo un esfuerzo. Estoy quitando mucho tiempo a la familia y a los amigos fundamentalmente. Estoy cumpliendo con mis responsabilidades como alcalde y ya dije en su momento que cuando esas responsabilidades fueran absolutamente incompatibles, tendría que dejar la Alcaldía; pero una vez cumplido el ciclo y agotada prácticamente la legislatura. De cara al próximo periodo electoral me centraría como candidato a la Presidencia de Castilla y León por el PP.
—Ya confirmado que será el candidato a las autonómicas ¿cómo ve esa cita una vez que ya empiezan a plantearse y acercarse los comicios?. De hecho estamos a las puertas de la cita electoral de Andalucía.
De cara a las elecciones de Castilla y León veo dos posibilidades: por un lado está claro que el PP es el gran partido moderado, el de las clases medias, tanto de las ciudades como del mundo rural; es el gran partido del centro y de la derecha de Segovia y de Castilla y León. La otra opción es la de la izquierda, que es una coalición de socialistas, comunistas, separatistas… como ya lo estamos viendo en el Gobierno de España. Esan son las dos opciones que tienen los segovianos cuando vayan a coger la papeleta para votar.
Es verdad que a lo que aspiro y espero es seguir siendo el partido mayoritario. Somos la formación mayoritaria en Segovia y en Castilla y León porque nos vota gente muy distinta: gente mayor, pero también gente joven; nos vota gente del campo y también gente de la ciudad; nos votan funcionarios, empresarios, profesionales liberales, nos votan profesionales de la sanidad y de la educación… Estamos hablando de que somos un partido plural, abierto a la sociedad y lo que queremos es seguir siendo el partido de la tierra, de la gente, de las personas de Segovia y de Castilla y León. Aspiramos a ser no solo el partido mayoritario y a ganar las elecciones —como vaticinan todas las encuestas—, sino a obtener el máximo de votos y el mejor resultado posible.
—Si en Castilla y León hubiera que pactar con algún partido para gobernar la Junta ¿están cerradas las puertas o abiertas en este momento con algunos partidos? En Andalucía ya se han planteado posibles acuerdos.
Si va a haber o no necesidad de acuerdos, lo decidirán los votantes de Segovia y de Castilla y León. Desde luego y a partir de ahí he demostrado que he sido capaz de gobernar con mayoría absoluta y con mayoría simple; de entenderme, de dialogar, de escuchar, con mayoría absoluta y sin mayoría absoluta. Yo creo que esa capacidad de diálogo es necesaria de cara al periodo que estamos viviendo, en el que las mayorías absolutas son muy complicadas. Pero tengo que añadir que de cara a las elecciones hay una gran diversión y una variedad y pluralidad de opciones políticas. Yo insistiría en que el centro derecha no puede perder la posibilidad de gobernar Castilla y León y Segovia. Porque si nos dispersamos con el voto eso es renunciar a gobernar. Si dividimos nuestra opción electoral con otras fuerzas políticas, desde luego pasará lo que ha ocurrido en España: que nos hemos dispersado y ahora gobiernan los socialistas, comunistas, separatistas, populistas… y desde luego es fundamental que la gente entienda que la gran opción es el partido de la tierra, de las personas… es el PP.
— En el caso de Segovia, para las elecciones municipales ¿cómo se encuentra de avanzado el proceso de búsqueda de candidatos? En Segovia se espera conocer pronto al candidato o candidata a la Alcaldía que presente el PP.
Diríamos que estamos en una fase de tanteo. Es verdad que desde la Dirección nacional —que es quien marca en este momento los plazos para las candidaturas autonómicas y municipales— se ha decidido que se espere al mes de diciembre, porque se produjo la convocatoria de las elecciones autonómicas andaluzas, y se pospuso la decisión de quién tiene que ser el candidato o candidata para las alcaldías. Pero estamos trabajando también en el ámbito rural y en municipios más grandes de la provincia como Cuéllar, El Espinar, La Granja, y en el resto de localidades. Pero será después de las elecciones andaluzas cuando los anunciemos.
— ¿Pero no puede avanzarse al menos si la apuesta va a ser un hombre o mujer ?
Tiene que ser una persona conocida, que tenga experiencia… estamos hablando de una ciudad, con una población con una edad media de 40-50 años, y por tanto que represente el sentimiento de lo que puede ser el perfil de los habitantes de Segovia. Por tanto, no hay pensar si hombre o mujer, sino que tenga una experiencia y que dé el perfil adecuado. Pero sobre todo que sea un proyecto válido. Queremos ganar las elecciones en Segovia y no solo ganar, sino gobernar porque esta ciudad lo necesita. Debo decir que cuando gobierna el PP hay progreso, hay evolución, hay desarrollo, hay oportunidades; y viendo cómo gobierna el PP en otras capitales del entorno, vemos que el progreso relativo es superior a cuando gobierna el PSOE, como ocurre ahora en la Alcaldía de Segovia.
— P. ¿Se cuenta desde el partido con alguna encuesta interna para conocer qué previsiones o posibilidades hay de recuperar el Ayuntamiento de Segovia?
Nosotros utilizamos muchos instrumentos para conocer y palpar lo que la gente demanda. Nos gusta preguntar a la gente lo que quiere en cuanto a candidatos: si tiene experiencia o no, que sea una persona moderada, que tenga empaque, que sea capaz de liderar un proyecto, y de coordinar un equipo. Son las características que buscamos. Luego hay mucho trabajo. No es decisivo el resultado de una encuesta, pero hablar con las personas de la provincia y conocer el pálpito de la ciudad te da una visión complementaria de lo que es una buena encuesta.
—P. Volviendo a la similitud de Segovia con Salamanca, hace poco se ha anunciado la instalación de una empresa del grupo Indra, que ya se implantó en Salamanca hace tiempo ¿Se nota la instalación de empresas tecnológicas en Castilla y León? ¿Puede ser síntoma de que por ahí puede ir el futuro de la industria y el empleo en la región?
Hay que recordar que hemos pasado una crisis profunda y lo primero que tenemos que hacer es recuperar un poco la autoestima. Desde el PP tenemos claro que Segovia es mejor ciudad cuando la gobernamos nosotros porque creemos en Segovia y en sus posibilidades. Tenemos que apostar por la potencialidad que tiene esta ciudad. Nosotros tenemos claro que vamos a dar todas las facilidades para que vengan todas las empresas que quieran instalarse en la provincia de Segovia. La cercanía a Madrid puede ser para algunas cosas un inconveniente, pero para otras es una gran ventaja. Tenemos que ser capaces desde Castilla y León —ahora que estamos saliendo la crisis económica— de dar una oportunidad y que ésta sea una tierra de futuro, donde resulte fácil instalarse los proyectos empresariales. Desde luego yo diría a la izquierda que gobierna la ciudad que apostara por proyectos empresariales que son oportunidades para Segovia y también para la provincia.
—P. En ese próximo reto electoral se encuentran algunas demandas sanitarias y educativas que han presentado los ciudadanos, como las que le han hecho estos días en su visita a Segovia.
Tengo que poner de manifiesto que el PP, con el esfuerzo de toda la sociedad, ha demostrado que tenemos una buena sanidad pública en Castilla y León y en Segovia; tenemos un buen sistema educativo; hay un sistema de pendencia muy bueno. Pero desde el PP no nos conformamos con eso. Somos ambiciosos. Llevamos en nuestros genes el carácter reformista, el hacer reformas para mejorar, para que la gente de Segovia viva mejor, con los servicios públicos clásicos, pero tenemos que apostar por una política de vivienda cercana a la gente, con mejoras en los sistema de transportes, que lleguen las nuevas tecnologías a todo el territorio y todas las personas puedan manejarlas.
La radioterapia es ya una realidad porque estamos trabajando, y desde la presidencia del PP de Segovia muy especialmente, para que sea una realidad en aquellas áreas de gestión donde no estaba implantada. Ha cambiado el sistema garantizando la calidad de atención al paciente y lo que queremos es mejorar los resultados del sistema sanitario a través de una mayor accesibilidad con estas unidades satélites con las que se van a desplazar los profesionales sanitarios para atender a los pacientes.
— P. Pero desde el PSOE de Segovia le reprochan que no es realista su promesa sobre la unidad de radioterapia.
En el tema de la sanidad es muy fácil hacer demagogia, partidismo y vender humo. Hay cuestiones que debemos sacar del debate político y centrarnos en lo importante, que son los pacientes y atenderlos lo mejor posible. Pero en cualquier caso creemos que tenemos un buen sistema social, de educación, de sanidad, de dependencia, y eso hay que conservarlo.
—P. Volviendo a la educación ¿comparte las declaraciones que hizo la exministra García Tejerina sobre la diferencia entre Andalucía y Castilla y León en cuanto al nivel educativo que hay entre algunas comunidades y otras?
Es que es una realidad. El informe PISA, que analiza los sistemas educativos de todo el Occidente, no sólo de la Europa Desarrollada sino también de los países de la OCDE, se confirma que somos punteros, somos la locomotora de la educación en España. El secretario regional del PSOE dice que su modelo de gobierno es el del PSOE de Andalucía. Y le aporto dos datos: el sistema educativo andaluz está en los últimos puestos, y en los primeros está el de Castilla y León, gracias al esfuerzo de toda la comunidad educativa, no solo de los profesionales, sino de los padres, los alumnos… y la política educativa de la Junta de Castilla y León.
Y una otra parte vinculada a la educación es el empleo, las oportundidades de trabajo que ello implica luego. En Castilla y León tenemos tres puntos menos de porcentaje de paro que la media de España. Y en Andalucía hay ocho puntos de paro más que la media de España. Las políticas del PP en Castilla y León nos hacen tener un buen sistema educativo, y más empleo y oportunidades para Castilla y León. Las de Andalucía, que es donde se mira el PSOE de Castilla y León nos hace tener más paro y un peor sistema educativo.
—P. Otro reto importante de futuro para Castilla y León es el problema demográfico, sobre todo en el medio rural ¿Cree que hay solución a la despoblación o es una tendencia inevitable dada la estructura social y la pirámide demográfica que la caracteriza?
Las previsiones de los expertos dicen que el 80% de la población mundial vivirá en ciudades en los próximso años. Pero lo que tenemos que hacer nosotros es una política activa en favor de que la gente viva en el mundo rural. El PP es el único partido comprometido con el medio rural. Es algo que nadie pone en duda. Hablamos de la sanidad rural, de la escuela pública en el medio rural, de la dependencia en el mundo rural…. Pero tenemos que apostar también por los nuevos servicios que demanda la gente. Hemos de apostar por ellos para poder seguir viviendo en los pueblos en la provincia de Segovia o cualquier otra de Castilla y León. Me he referido a Internet y a las nuevas tecnologías, como la televisión digital, que tiene que llegar a todos los hogares de todos los pueblos, a todos los rincones de Castilla y León. Hay lugares agrestes, cierto, pero debe llegar a todos los lugares habitados. Tenemos que hablar también de la conciliación de la vida laboral y familiar; hay que hacer un esfuerzo para que la educación de cero a tres años llegue cada vez a más personas, no solo con plazas públicas, sino también con una política de ayudas y de deducciones fiscales sobre todo en el ámbito rural; apostar por la tarifa plana para que se pongan en marcha proyectos empresariales para los autónomos en el mundo rural; también la política de vivienda, no solo tener viviendas más accesibles en las ciudades, con ascensores, con calefacción; tenemos que hacer una apuesta en ese ámbito, y para que los jóvenes se instalen en el mundo rural. Y también otro servicio por el que hay apostar es por mejorar las comunicaciones entre todas las localidades, con una mejora de la conectividad, mejora entre Segovia y el resto de los municipios de la provincia, y entre los propios pueblos.
— P. Imagino que con esa conectividad se refiere a las carreteras. En este sentido ¿qué opinión le merece la apuesta del Gobierno central actual de retirar el peaje en la AP-1 y cobrar por el uso de las autovías que nos afecta de lleno a Castilla y León?
Me parece que el Gobierno socialista tiene una empanada mental considerable. Y lo que está haciendo es volver al círculo vicioso de los gobiernos socialistas, que consiste en tener más gasto público, y eso hay que financiarlo con más impuestos, gravando al diésel, con el impuesto de las hipotecas, con más cotizaciones para los autónomos, lo que parece que va a ser la subida a las empresas con el IRPF; es decir, se anuncian subidas de impuestos porque hay un mayor gasto público. Eso provoca claramente una recesión y paro. Eso es su círculo vicioso. El caso de las autopistas y autovías es un ejemplo claro de este contrasentido: por un lado dicen que van a suprimir el cobro, y por otro que lo van a poner. Suena a broma. Lo que tiene que hacerse es una política seria, una reflexión sobre lo que van a ser esas infraestructuras. Lógicamente en Burgos se sienten burlados por esta decisión: primero se dice que se va a quitar el peaje de la AP-1, pero a la vez abren la puerta a cobrar por circular por ella. Nosotros hemos mantenido y defendido una política de que se fueran terminando las concesiones de las autopistas e ir eliminando los peajes progresivamente. Es mejor tener una autopista de peaje que no tener nada. Se trajo la conexión por autopista de Madrid a Segovia con la AP-61, y cuando acabe el periodo de concesión haremos una reflexión para eliminar el peaje de esta autopista.
