El delantero del FC Barcelona Lionel Messi, recién ganador del FIFA Balón de Oro 2010, ha dado un paso más en su particular carrera para ser considerado el mejor jugador de la historia al conseguir este trofeo por segundo año consecutivo a sus 23 años, emulando a Marco Van Basten (88 y 89), Johan Cruyff (73 y 74), Karl-Heinz Rummenigge (80 y 81) y Michel Platini (83,84 y 85).
Pocos títulos le quedan por ganar y cada vez está más cerca de los registros de las grandes leyendas del deporte rey. Los inicios del astro argentino no fueron nada sencillos, pues un problema hormonal afectó a su crecimiento y a punto estuvo de truncar su ahora brillante carrera futbolística. Fue el FC Barcelona quien vio en él un gran futuro y apostó por aquel ‘loco bajito’, ‘La Pulga’ como le puso su primer entrenador en el Potrero, que ahora brilla con más quilates que nadie en el fútbol actual.
Sin embargo, el tratamiento recibido anuló el problema de aquel niño que no se arrugaba ante chicos mayores y que, con la formación en La Masía del club blaugrana, primero, y la experiencia adquirida en todas las categorías hasta debutar con el primer equipo, después, han hecho de Messi un jugador ‘de oro’.
Aúna velocidad, desequilibrio y gol, sus características más fuertes y que en muchas ocasiones pone en juego a la vez para conseguir goles estratosféricos, como el conseguido ante el Getafe, en Copa del Rey (2007), en el que emuló a su ídolo Diego Armando Maradona y su gol ante Inglaterra. Su rapidez y fortaleza, pese a los 169 centímetros de estatura, hace que sea muy complicado derribarle una vez inicia la carrera.
Hasta el año pasado, Messi había desbordado principalmente llegando desde la banda, pero tras un reordenamiento táctico del técnico, Josep Guardiola, ha demostrado que como falso nueve es igual de efectivo, quizá incluso más letal. Tras este nuevo título, al ‘crack’ argentino solo le queda conseguir con la albiceleste el cetro de campeón del mundo. Sin duda, el hecho de coincidir con grandes futbolistas en el Barcelona, como Xavi o Iniesta (ambos finalistas al premio), ha contribuido a que con el tiempo se haya convertido también en un buen asistente.
Tras dos años peleando por el Balón de Oro, siendo tercero en 2007 y segundo en 2008, y ganarlo en la pasada edición, este curso ha sido el primer jugador en la historia en conseguir el galardón que se ha unido al FIFA World Player. Por lo que el título demuestra el consenso obtenido entre los corresponsales y redactores de la revista France Football y los seleccionadores y capitanes.
Su primer gol como blaugrana llegó en 2005, el 1 de mayo y contra el Albacete, cuando se convirtió en el jugador más joven de la historia del Barcelona en marcar en un encuentro de Liga. En cuanto a su debut, fue ni más ni menos que en un derbi catalán contra el Espanyol, el 16 de octubre de 2004, que acabó con victoria blaugrana.
La temporada 2005-06 fue la de su explosión como jugador del primer equipo, después de un gran debut en el trofeo Joan Gamper contra la Juventus. Se exhibió en campos como el Santiago Bernabéu, en un partido que acabó 0-3, o Stamford Bridge, en los octavos de final de la Liga de Campeones contra el Chelsea. Una lesión muscular le dejó fuera en el tramo final de la competición.
A partir de aquí, la evolución del argentino fue meteórica, aumentando su protagonismo temporada tras temporada, así como su número de goles y asistencias. Estuvo a la sombra de grandes jugadores, sobre todo de Ronaldinho, pero con la marcha del brasileño al Milan por su pobre rendimiento, su amigo Messi fue quien cogió las riendas del equipo y lo volvió a llevar hasta la senda del triunfo. De hecho, ya forma parte de la historia blaugrana, pues el 1 de febrero de 2009 fue el autor del gol número 5.000 en Liga para el Barça, tanto anotado con la derecha en el estadio de El Sardinero frente al Racing de Santander.
