Agentes medioambientales de la Junta de Castilla y León recuperaron los restos de dos buitres leonados en un chopo en Riaguas de San Bartolomé, después de recibir una llamada el pasado viernes 5 de octubre, alertando de la presencia de un cadáver en la copa de un árbol. Al acercarse al lugar, los agentes descubrieron un segundo cadáver bajo el chopo, que también fue retirado.
La zona donde sucedieron los hechos es un posadero y dormidero habitual que la especie frecuenta por la cercanía al muladar de Campo de San Pedro, donde los buitres leonados suelen alimentarse.
Los indicios apuntan a que ambos buitres murieron a causa de las heridas provocadas por las ramas de los chopos. La certeza es casi absoluta en el caso del ave hallada en la parte alta del árbol. Por su parte, en el caso del buitre encontrado a los pies del chopo, se esperará el resultado de los análisis por parte del personal del Centro de Recuperación de Animales Silvestres (CRAS) ‘Los Lavaderos’ de Segovia para descartar otras posibles causas.
Para recuperar los restos del ejemplar localizado en la copa del árbol, se movilizó al Grupo de Intervenciones en Altura de Segovia para la conservación de especies protegidas que se desplazó hasta el lugar al día siguiente. Con el apoyo de otros dos agentes, un profesional de este equipo especializado ascendió hasta el punto en el que se hallaba el animal, donde comprobó que el ala izquierda del ave había sido atravesada por una rama rota, dejando al ejemplar completamente atrapado. La abundancia de ramas finas a esa altura y el viento complicaron los trabajos que, a pesar de las difíciles condiciones, finalizaron sin incidentes.
Hay que recordar que, aún hoy, el uso de veneno en el campo es una práctica empleada para eliminar ciertas especies. Por eso, ante el hallazgo de un animal herido o muerto es importante no tocarlo, ni manipularlo y dar aviso de forma inmediata.
Así, ante hechos que puedan ser constitutivos de u delito o infracción administrativa, los agentes medioambientales de la Junta realizan las correspondientes investigaciones levantando los cadáveres y tomando las muestras necesarias, garantizando su inviolabilidad como prueba.
