Un incendio supuestamente provocado por un perturbado quemó ayer la sacristía de la cripta de la Sagrada Familia de Barcelona sin afectar ni la estructura ni las creaciones originales del templo de Gaudí, aunque obligó a desalojar a los 1.500 turistas que la visitaban.
El fuego, que se declaró a las 10,45 horas de la mañana y fue controlado rápidamente, se localizó en la sacristía de la cripta, que, junto a la fachada de la Natividad, es Patrimonio de la Humanidad y que ha quedado ennegrecida por el humo, aunque no ha habido mayores desperfectos.
Solo cuatro trabajadores del templo tuvieron que ser atendidos por los equipos de socorro debido a la inhalación de humo, y el templo modernista pudo reabrir sus puertas por la tarde, tras realizarse todas las verificaciones necesarias.
Los Mossos d’Esquadra detuvieron como supuesto autor del incendio a un hombre de 65 años, José María L.S., que, según diversas fuentes oficiales, tiene problemas mentales.
El individuo fue retenido por un pequeño grupo de turistas que, en el momento de los hechos, visitaban la sacristía, donde está enterrado el genial arquitecto catalán Antoni Gaudí. El arrestado, que tiene dos antecedentes policiales por hurto y es un habitual de los Servicios Sociales, llevaba en sus bolsillos mecheros y varios trapos con los que, al parecer, prendió el fuego.
El presidente del Patronato de la Sagrada Familia, Joan Rigol, apuntó que el hombre, quien al ser capturado negó con reflexiones inconexas haber provocado el incendio, es una persona con las facultades mentales perturbadas.
La cripta de la Sagrada Familia, recientemente reformada, ha quedado ennegrecida por el humo, que también ha entrado en la nave central, lo que obligó a desalojar a los 1.500 turistas que visitaban el templo, uno de los iconos de Barcelona más conocidos mundialmente y que en noviembre pasado fue consagrado como Basílica por el Papa Benedicto XVI.
Aunque la entrada al edificio es de pago, el acceso a la cripta, situada bajo la nave central, es libre, dado que se trata de la parroquia del barrio donde se celebran misas a diario.
Se reforzará la seguridad
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Rigol reconoció que será necesario reforzar las medidas de seguridad en el conjunto basilical para evitar incidentes como el que ayer sembró la alarma entre visitantes y vecinos de la iglesia, forzó a cortar diversas calles de los alrededores y motivó la intervención de varias dotaciones de bomberos y policías.
La sacristía, de unos 40 metros cuadrados, ha quedado totalmente calcinada, así como el mobiliario y la indumentaria de los sacerdotes que se guardan en ella.
En un primer momento, se temía que para poder extraer el humo acumulado en la cripta fuera necesario romper algunas de las vidrieras originales de Gaudí, si bien finalmente se pudo airear la estancia subterránea -que recibe luz exterior a través de los vitrales- mediante enormes ventiladores y el hueco de una ventana.
Poco después de las 16,30 horas, las puertas de la Sagrada Familia se abrieron de nuevo a los turistas, una vez que los Bomberos airearan la nave central, que se había llenado con las emanaciones de la combustión de diversos materiales, y que los técnicos descartaran cualquier daño estructural en la Basílica.
Una vez abiertas las puertas del templo, a la entrada se formaron las colas habituales de turistas, muchos de los cuales ni siquiera se habían enterado del suceso ni de que la edificación había sido cerrada durante casi toda la mañana.
olor a quemado. En el interior del templo aún se notaba el olor a quemado, aunque los turistas tienen acceso a toda la Basílica, excepto al altar, donde se colocó un cordón de seguridad para evitar el paso de las personas, ya que está situado encima de la cripta.
El jefe técnico del proyecto de construcción de la Sagrada Familia, Jordi Coll, aseguró que el incendio no ha afectado «en absoluto» las estructuras de la cripta y la sacristía, recientemente restaurada.
Concretamente, las llamas calcinaron un armario de madera de la sacristía donde se guardaba la indumentaria de los sacerdotes, así como algunos libros y misales, pero no afectaron a ninguno de los elementos ornamentales del recinto religioso.
Precisamente, la cripta de la Sagrada Familia -patrimonio de la Humanidad junto a la Fachada del Nacimiento del templo- fue restaurada hace dos años, unos trabajos de rehabilitación que ahora habrá que abordar de nuevo. Estas labores consistirán fundamentalmente en la limpieza de las paredes de la cripta, que han quedado ennegrecidas por las llamas, según el arquitecto.
La Junta del templo decidió su reapertura una vez que los Bomberos acabaron de sacar la humareda y que los técnicos confirmaran que el conjunto no ha sufrido daños estructurales.
Rigol, anunció, asimismo que se mantendrán los actos convocados en la Sagrada Familia para el próximo sábado, diada de Sant Jordi, y el domingo, en que está prevista la celebración en el templo de un homenaje en recuerdo a las víctimas del terremoto de Japón.
