Que el presidente de la Asociación Cultural Plaza Mayor de Segovia, Francisco del Caño, es capaz de cambiar la realidad y recrear escenas inimaginables ya nadie lo duda y ayer lo volvió a hacer en una nueva edición de los “sanfermines segovianos”. Esta fiesta cuenta con un centenar de adeptos que, con camisa blanca, pañuelo rojo al cuello y periódico en la mano, cumple con la tradición pamplonica adaptada a Segovia de cantar a San Fermín y correr ante los astados de la ‘ganadería’ ‘Tirotateiro’ por las calles de la Judería, decoradas para la singular fiesta taurina.
Antes del encierro con carretones, los integrantes de la Asociación Cultural Taurina Avanto, de Santa María la Real de Nieva, dieron un pregón en el que felicitaron al equipo ‘Plaza Mayor’ por crear este hermanamiento entre Segovia y Pamplona. Recordaron el despliegue de actividades que lleva a cabo su asociación creada en 2002 —visitas a ganadería, festejos y conferencias taurinas, actos culturales— y evocaron la historia de la plaza de toros de Santa María la Real de Nieva, con 170 años de antigüedad.
Jaime Barbado, en nombre de ‘Avanto’, recogió un azulejo con la reproducción del óleo de Lope Tablada que ilustra los sanfermines segovianos, y el periodista y crítico taurino Manuel Illana Martín recibió el bastón de Apoderado de Honor, con empuñadura en estaño creada por el artesano Jesús de la Cruz, y el óleo de Lope tablada. Vecinos de Valverde del Majano y de Santa María la Real, incluido su alcalde Jaime Pérez, se sumaron a la fiesta que terminó en la plaza del Rastrillo con lances a los carretones, música de dulzaina y tamboril y churros.
