La colocación de los estandartes de Titirimundi en la Plaza Mayor marca el inicio del Festival cada año, devolviendo a Segovia el color único que tiene cuando se llena de títeres. Y hasta los estandartes se quedó más de uno con ganas de subirse ayer para coger un buen sitio desde el que disfrutar del espectáculo, porque era complicado encontrar hueco.
Las entradas vuelan en taquilla cuando se ponen a la venta y desaparecen en internet, así que conseguir un pase para un espectáculo en el teatro o en los patios es muy complicado. Llenos hasta el estandarte están, sobre todo durante el fin de semana.
Menos mal que Titirimundi ofrece muchas alternativas para que todo el que quiera pueda disfrutar de una gran puesta en escena. Sorprendente como Mauvais Coton, que realiza un número de circo todoterreno para un mástil culbuto, desafiando los límites de la estabilidad; divertido, como ‘Dos Segundos’, de Petit Monsieur, que consigue hacer reír a los espectadores hasta que no pueden más; entrañable, como ‘Mr. Barti’, que ofrece cada día un concierto único e inolvidable…
Son tantas las alternativas que el día se queda corto para acudir a todas. Pero no hay problema, porque hoy Titirimundi vuelve a ofrecer una jornada repleta de espectáculos, de diversión, de magia, de alegría e ilusión. Las plazas comenzarán su actividad pronto, a las 11.30 horas, con El Retablillo en la plaza de la Trinidad y desde ese momento el carrusel del Festival no dejará de girar.
Cabe destacar dentro de la programación dominical el concierto en familia que Ensemble TMC 18 ofrecerá, a las 12.00 horas en el Conservatorio Profesional de Música, como homenaje a Julio Michel en el primer Titirimundi que dirige desde otro lado, pero con la misma maestría que siempre.
El Circo Rasposo reinterpreta el mito de Pentesilea y Aquiles con acrobacias y música en directo
El amor le jugó una mala pasada a Pentesilea, pues, según cuenta el mito, enamorada de Aquiles, no quiso que él le perdonara la vida, así que acabó muerta en sus manos. En plena guerra de Troya, el héroe clavó su espada en el pecho de la amazona.
Se trata de un episodio con gran carga dramática, por ello lo ha elegido la compañía francesa Circo Rasposo para su último espectáculo ‘La dévorée’, que reinterpreta el mito bajo la carpa, con un estilo circense contemporáneo, con tintes de teatro y música en directo.

Explica Marie Molliens, directora de la compañía, que en escena hay ocho personas: cinco acróbatas y tres músicos. Pero su presencia, su fuerza, su dramatismo, consigue llenar el espacio aunque solo haya dos artistas en el ruedo.
“Las acrobacias se usan como un idioma y son lo que cuenta la historia”, añade Molliens, quien se muestra encantada de estar en Segovia y participar en la XXXII edición de Titirimundi.
El Circo Rasposo instaló su carpa en el barrio de San Lorenzo el pasado jueves y, desde entonces, ninguno de los espectadores ha salido indiferente del espectáculo, porque el dramatismo, las contorsiones, los intensos gestos de los acróbatas, la música… en definitiva, el circo, se mete en el cuerpo todos aquellos que lo disfrutan.
