La actualidad gira y se revoluciona de forma inmisericorde incluso en los últimos días del año, sin dar tregua ni siquiera en las fiestas navideñas. De igual modo, la música nos reservaba una última y agradable sorpresa en el afortunadamente cada vez más extenso catálogo de conciertos que nos ofrecen las distintas salas de la capital.
En este caso, el colofón a esta temporada lo puso la segoviana Rebeca Jiménez en la sala Kun-D, que inicia una prometedora andadura ubicada en un histórico local por el que ya han pasado algunas de las figuras más importantes del panorama musical.
Con un amplio bagaje ya a sus espaldas, Rebeca Jiménez mostró en su tierra natal y ante sus paisanos la capacidad de una brillante cantautora que recoge las esencias del rock, los medios tiempos y el blues para convertirlos en canciones capaces de desnudar sentimientos.
Jiménez quiso concluir en Segovia la gira de presentación de su primer trabajo «Todo llegará» y dar a conocer ante sus amigos algunas de las canciones de su próximo trabajo, en donde promete canciones «con más amor y menos desamor», según sus propias palabras. El hecho cierto es que la música de esta joven cantautora consigue esponjar el corazón con letras cargadas de emociones que utilizan historias cotidianas para ir de lo básico a lo fundamental de forma directa.Y todo ello, empleando un lenguaje universal como es el rock, que sabe tamizar sin hacerle perder sus valores, aunque evidenciando algunas preocupantes tendencias comerciales, lógicas en una artista que quiere seguir viviendo de su música, pero innecesarias para una artista con un impresionante potencial.
La voz de Rebeca Jiménez sugiere, subraya, acaricia y golpea con sus distintos matices, y se acompaña del piano para remarcar sus propias vivencias, arropada por dos músicos que entienden, asimilan y hacen suya la propuesta de la artista sin ningún tipo de fisuras.
Ante un publico poco colaborador , al que pidió y después ordenó el necesario silencio para llevar a cabo su actuación, Rebeca Jiménez mostró sus credenciales para permanecer en el mundo de la música, donde ha elegido un lugar fuera del circuito, pero que le garantiza un largo recorrido en el que, a buen seguro, no faltarán las buenas canciones que es capaz de crear. Seguiremos disfrutándolo.