El tenista español David Ferrer dio el quinto y definitivo punto a la ‘Armada’ para acceder a semifinales de la Copa Davis, donde se medirá con Francia, después de superar en cinco sets al alemán Philipp Kohlschreiber, rematando el triunfo en la Plaza de Toros de Valencia que permitió en el arranque del domingo Rafa Nadal despachando a Alexander Zverev.
‘Ferru’ recuperó su tradicional traje de ‘Gladiador’ para devolver a España a unas semifinales de Davis seis años después, con un triunfo en cinco horas 7-6(1), 3-6, 7-6(4), 4-6, 7-5. Contra el viento, la amenaza de lluvia y un rival dispuesto a estropear la fiesta en la capital del Turia, el de Jávea se llevó la alegría de la temporada en casa, para buscar de paso en lo personal recupera su sitio en el Circuito ATP.
Ambos tenistas protagonizaron un comienzo de partido equilibrado, defendiendo sus servicios, sólidos ante la amenaza de la lluvia. En el sexto juego, empezó el movimiento. En su primera oportunidad, el alicantino lograba romper el servicio de su adversario, que contestaba con un ‘contrabreak’ poco después.
Intratable
La igualdad permitió un final de set intensísimo y largo, con el de Jávea defendiéndose de dos bolas de ‘break’ en contra y con Kohlschreiber haciendo lo propio ante las tres ocasiones de rotura de las que dispuso el español.
Así, todo tuvo que dilucidarse en el ‘tie-break’, donde Ferrer se mostró intratable; mantuvo su saque y rompió tres veces el del teutón para cerrar, después de 65 minutos de juego, el primer set.
La tónica se mantuvo en la segunda manga, esta vez resuelta a favor del germano, que rompió al español en el sexto juego. A pesar de que el alicantino recuperó el saque, Kohlschreiber volvió a quebrar para adjudicarse el parcial.
Las primeras gotas amenazaban con detener el encuentro, que siguió a pesar de todo. Dos roturas, una para contendiente, precedieron a un juego eterno, donde Ferrer necesitó recurrir al vigésimo tercer punto para defender su servicio, tras resistir a seis pelotas de ‘break’ de su rival. Volvieron a quebrar los dos y el tercer set quedó por resolverse en la muerte súbita, de nuevo para ‘Ferru’ no sin épica.
Aún quedaba Davis en Valencia, para sufrir con un Kohlschreiber que salvó la única bola de ‘break’ en el quinto juego y mandó el duelo al quinto set ganando el cuarto al resto.
La amenaza de lluvia quedó en eso, pero los remolinos de viento exigieron el máximo sobre la pista. A Ferrer le tocó defenderse, salvó un 15-40 en el octavo juego y no encontró resquicio hasta el undécimo, donde rompió para levantar los brazos victorioso a continuación.
Escenario de remontada
Después del 1-2 del sábado con la derrota de Feliciano y Marc López en el dobles, el número uno del mundo apareció para levantar la moral de la ‘Armada’. Obligando a su rival a correr en el fondo de la pista, el de Manacor consiguió llevar la eliminatoria al quinto y definitivo partido, trasladando la presión a Ferrer.
Ante el coso taurino abarrotado, Nadal, que ya puso el 1-1 el viernes al imponerse a Kohlschreiber, exhibió su mejor tenis en una primera manga que liquidó en poco más de media hora. Con una rotura en el segundo juego, el 3-0 aligeró su camino mientras Zverev trataba, sin éxito, de buscarle las cosquillas.
Un nuevo ‘break’ en el sexto puso casi la sentencia, y, aunque el germano se defendió de dos bolas de set, nada pudo hacer en la tercera de la que dispuso el español.
La segunda manga comenzaba bien para el balear, que rompía para sumar su cuarto juego consecutivo, aunque ‘Sasha’ respondía con un ‘contrabreak’. No se desconcentró Nadal, que celebró con efusividad su victoria al resto en el quinto juego con un golpe de derecha al que no llegó su rival.
La maquinaria ya estaba en funcionamiento. Zverev defendió su primer saque de la tercera manga, pero sufrió el arreón de Nadal, que enlazó cuatro juegos. El alemán frenó la sangría en el sexto juego al firmar su segundo quiebre, que confirmó después con su servicio. Sin embargo, Nadal aprovechó su ‘break’ de ventaja para, en el décimo y en la primera de sus dos bolas de partido, liquidar el encuentro.
