Ana Belén será este fin de semana una de las protagonistas de la Fiesta de Santa Águeda de Zamarramala. Recibe el ‘Matahombres de Oro’, un premio entregado a un personaje cuyo papel dentro de la sociedad actual se haya destacado por realizar actos en pro de la revaloración del rol femenino. La artista agradecerá un galardón que le hace especial ilusión por su “ironía” y por su “gracia”.
¿Conoce la Fiesta de Santa Águeda de Zamarramala?
No he estado nunca en esta fiesta, pero sí tengo recuerdos de imágenes que he visto, de cuando era pe queña también, del día en que las mujeres de Zamarramala eran alcaldesas por un día.
Cada año he visto informaciones de premios que han dado a otras mujeres, algunas compañeras de profesión. Y luego, yo tengo familia en Segovia y conozco el tipo de fiesta que es. El nombre ‘Matahombres’ se lo debe a aquel alfiler con el que se sujeta el refajo del traje de la alcaldesa zamarriega, y con el que las mujeres podían mantener a raya a los hombres alejándolos con el alfiler.
¿Qué supone que le reconozcan con este galardón?
Me hace mucha ilusión que me lo concedan. Primero, porque desde hace muchos años vienen llamándome de Zamarramala, pero siempre me ha pillado trabajando en el teatro, y no te puedes mover de Madrid; pero este año, cuando me llamaron, me comprometí, y estoy muy contenta, porque tengo una parte de Segovia, mi padre era de allí, y he pasado parte de mi infancia en Segovia. Siempre voy con mucha alegría, sigo teniendo familia y sigo escapándome a menudo. Me gusta pasear por allí y considero que es un poco mi casa.
Me hace ilusión que se hayan acordado de mí las alcaldesas, que sea un premio con tanta ironía, y por otro lado, en este momento que estamos viviendo de reafirmación en muchos sentidos, de la necesidad de una igualdad a todos los niveles con respecto al hombre, pues es un premio que también tiene su gracia.
¿También se trata de un galardón reivindicativo?
No es que vayamos a matar a los hombres. Yo siempre he dicho que las reivindicaciones como mujer y como género femenino, son de igualdad respecto a los hombres, nunca tienen que ser en contra de ellos. Se trata de encontrar en el camino compañeros, con los que reivindicar esas cosas y también otras más generales.
Y afortunadamente, sí que es verdad que en el camino, hay cada vez más hombres solidarios y abiertos a andar conjuntamente este camino y a reivindicar que las mujeres deben pesar lo mismo en la balanza y deben tener el mismo lugar al otro lado. Hay muchos hombres que en este momento se encuentran en ese lugar.
¿Se ha sentido discriminada en algún momento en su profesión por ser mujer?
La discriminación está en la sociedad en todos los niveles, también en esta profesión. Es verdad que la profesión de actor desde siempre ha sido muy libre, aunque en un principio estaba prohibido que actuasen las mujeres. En el momento en que empiezan a trabajar, a encontrar su lugar, sí que es verdad que se vive una gran libertad dentro de la profesión, pero dentro de esa libertad que cada una hemos ido encontrando, no quita para que sepamos que también es una profesión machista. Poco a poco hemos ido arrancando trocitos de esos lugares, directoras, creadoras, guionistas, músicas,… se va arrancando, porque el lugar no te lo dan, te lo tienes que ir arrancando tú.
¿No le da la sensación de que en los últimos años se está retrocediendo en el camino hacia una igualdad real?
Tengo una cosa muy clara. Mientras no se ataje desde los comienzos de un ser, es decir con la educación, mientras no seamos capaces de saber que esto es un problema de educación, de cómo educamos a niños y niñas, será muy difícil atajarlo. Estamos viendo en estos momentos en los adolescentes un comportamiento que nos escandaliza, pero es porque reciben una educación en el sentido de la igualdad, escasa, mala y tendenciosa. Por eso está ocurriendo que nuestras jóvenes tienen comportamientos que nosotras tenemos superados.
¿Qué les va a decir a las mujeres de Zamarramala el domingo, en la entrega del premio de ‘Matahombres’?
Tengo que agradecer. No me quiero extender y no quiero dar lecciones a nadie en ese sentido. Quiero agradecer porque me dan un premio y punto.
En su faceta como actriz, interpreta ahora en ‘Traición’, de TVE, a Pilar Riego, cabeza de una familia donde la bondad brilla por su ausencia. ¿Qué tal esta nueva experiencia en la televisión?
Estoy muy contenta, porque todo el equipo de ‘Traición’ hemos hecho una unión muy grande y hemos sido unidos para conseguir un resultado muy digno. Creo que es un trabajo muy bien hecho por parte de todo el mundo, tanto a nivel técnico como de actores.
Es un trabajo muy bueno y estoy muy contenta de haber trabajado con gente tan estupenda, ya que se han creado vínculos muy fuertes de amistad.
