El Viveros Herol Nava se agarró a su sistema defensivo, más un extraordinario Yeray Lamariano, para conseguir una valiosa victoria en la cancha del Balonmano Alarcos, en un encuentro que el conjunto segoviano tuvo controlado en todo momento, y que hizo que sobraran sus cinco últimos minutos, en los que entró con una distancia de siete goles en el electrónico.
El Balonmano Alarcos llevaba anunciando toda la semana que varios de sus hombres estaban renqueantes, pero tal y como señaló Dani Gordo, todos ellos formaron parte del equipo que saltó al Quijote Arena para medirse al conjunto segoviano, que también tenía algún jugador entre algodones, caso de Toma Brakocevic con una luxación en un dedo, o Andrés convaleciente de una gripe, pero el serbio también se vistió de corto, y echó una buena mano al Viveros Herol. Algo menos (todo hay que decirlo) aportaron los ‘tocados’ del Alarcos en el encuentro.
El encuentro transcurrió en su primera parte por los parámetros ya conocidos, puesto que tanto Alarcos como Nava son dos conjuntos bastante ‘académicos’ en su balonmano, con defensas fuertes y porteros de garantías. Así, tanto Revuelta como Yeray tuvieron ocasiones para el lucimiento, si bien es cierto que, con el transcurso de los minutos, el portero visitante fue agigantando su figura, bien asistido por una defensa que se movía con agilidad en el 6:0, cerrando los espacios.
Protegiendo el área local también se situó un 6:0 contundente en el conjunto de Ciudad Real, así que el encuentro no registró diferencias importantes hasta que, mediada la primera parte, el Viveros Herol comenzó a encontrar espacios por el centro, a base de mover la bola buscando siempre un pase de más que diera mejores opciones al compañero.
Un buen estirón
Con ventajas siempre visitantes, pero con el Alarcos respondiendo bien, se entró en el segundo cuarto del primer tiempo, en el que el conjunto de Dani Gordo mantuvo su nivel defensivo, mientras que el equipo local fue paulatinamente bajando el suyo. Las diferencias comenzaron a hacerse patentes en el electrónico, y bien pudieron haberse hecho más grandes si Filip Martins o Agustín Casado hubieran culminado acciones muy claras desde los seis metros.
Muestra del buen hacer defensivo segoviano fue la última acción del encuentro, en el que tras una exclusión para Álvaro Rodrigues, Bruno robó una bola para dejársela franca a Agustín, que no pudo culminar, llegándose al descanso con 10-15. El Alarcos , que había marcado siete goles en los primeros quince minutos, sólo pudo hacer tres en los siguientes quince, mientras que el Viveros Herol había mantenido su nivel, tanto en defensa como en ataque.
La segunda parte se inició con un cambio en la portería local, en la que entró Javi de la Cruz, pero sin más cambios en la decoración del encuentro, con el equipo visitante exhibiendo un gran nivel defensivo, tanto que apenas superados los primeros cinco minutos de segundo tiempo, la distancia en el electrónico ya era de siete goles después de que Isma Juárez y Agustín Casado machacaran una y otra vez la portería local a base de contragolpes.
Una apuesta arriesgada
El técnico local apostó entonces por cambiar la defensa, jugando más abierto con un 5:1, y apostando por hacer más eléctricos los ataques, intentando elevar el ritmo del partido, que se movía al son que tocaba el Viveros Herol. El cambio en los ciudadrealeños provocó más errores de los normales en el conjunto segoviano, que se aferró a Yeray para que el parcial de 3-0 que recibió en un corto espacio de tiempo no fuera a mayores, con acciones de mucho mérito sobre todo una en la que realizó hasta cuatro paradas consecutivas, que volvieron a dar moral al equipo, al que la exclusión de Carlos Villagrán había dejado algo lastrado en defensa.
Pero bastó con que Nava volviera a contar con todos sobre la pista para que de nuevo el equipo consiguiera organizarse, estuviera más activo en la parcela defensiva, con algunos robos de balón, y tuviera más fluidez en ataque, con Tello colaborando con sus lanzamientos desde nueve metros, que obligaron a abrirse aún más a la defensa del Vestas Balonmano Alarcos.
A diez minutos para el final, el partido estaba prácticamente decidido para el Viveros Herol, con siete goles de distancia, y su oponente tan negado de cara a portería que solamente lograba marcar desde los siete metros, ya que los segovianos apenas concedían un lanzamiento claro a ninguno de sus oponentes.
Cuando, a cinco de la conclusión, el marcador de 20-27 iluminaba el Quijote Arena, el equipo de Dani Gordo quiso dar el partido por terminado, como ciertamente lo estaba, por más que el Alarcos se lanzara a tumba abierta con una defensa en toda la cancha que propició ataques algo precipitados en los segovianos, que encajaron un rápido parcial de 3-0 que no fue más que un espejismo, porque Isma Juárez no falló desde los siete metros para volver a poner una renta tranquilizadora. Los de casa redujeron la diferencia todo lo que les concedió el tiempo restante, pero ya no tuvieron opciones frente a un Viveros Herol Nava que presentó sus credenciales al play off por el título, asaltando una cancha en la que nunca había conseguido la victoria. Tuvo que ser tras un partido muy sobrio, sin apenas concesiones para la galería, y contando con un portero extraordinario, como pudo conseguirlo.
Dani Gordo: «Hemos logrado dar mucha continuidad a nuestro juego ofensivo»
Dani Gordo sabía de la importancia de la victoria en Ciudad Real, no sólo por los dos puntos en sí, sino por lo que conseguía que no sumara un directo rival por el play off de ascenso. Por ello al final del encuentro se mostraba muy satisfecho con el trabajo de sus jugadores, “que consiguen competir en cada partido, y llegar siempre con opciones al fina. Hay partidos que se te pueden escapar, como el de Bordils, y otros en los que consigues la victoria”.
Aunque la defensa, más Yeray, brillaron con luz propia en el encuentro, el entrenador del Viveros Herol Nava quiso poner el énfasis en otro apartado, como el ataque “en el que logramos dar mucha continuidad a nuestro juego, abriendo mucho la cancha para encontrar a nuestros extremos. Posiblemente éste sea el encuentro en el que más opciones han tenido, que han resuelto con mucha calidad. Nuestra seña de identidad es una buena defensa y una portería férrea, por eso nos planteábamos darle más alternativas a nuestro juego ofensivo”, sin despreciar en absoluto las oportunidades al contragolpe, que en este partido fueron numerosas, “y fallamos algunas ocasiones claras, pero es que tampoco se pueden meter todas”.
La sobriedad del Viveros Herol Nava se notó desde el primer minuto de juego, con el equipo consiguiendo marcharse en el electrónico antes del descanso, y manteniendo con más soltura la ventaja, hasta llegar a unos últimos minutos que prácticamente sobraron, “y que fueron de un cierto descontrol, porque nosotros estuvimos algo más imprecisos, los árbitros bajaron el nivel de las infracciones, y el rival aprovechó para reducir las distancias. Pero cuando a seis minutos para el final nuestra renta era de siete goles, yo ya sentí que el partido estaba en el bolsillo”.
La victoria consolida al Viveros Herol en la tercera plaza, tras la derrota del Torrelavega, que se queda ahora a tres puntos del conjunto navero, empatado con el Cisne. “Hay tanta igualdad en la categoría, que no podemos mirar sólo a un rival. Al final, nuestro principal oponente debe ser el que nos toque en el siguiente partido”, que en el caso del Viveros Herol Nava será el FC Barcelona B, que visitará el frontón.
