“Si la Diputación ha creado las Escuelas Deportivas, ¿por qué no va a poder crear ahora una Escuela Provincial de Música?”. Tal declaración, formulada al final del maratoniano pleno de la Diputación de ayer por la diputada de Cultura, Sara Dueñas, da una pista sobre la principal novedad del ‘Plan Provincial de Cultura’, aprobado con los 13 votos del Partido Popular, a los que se unieron el del diputado de UPyD – Centrados en Segovia, Juan Ángel Ruiz, y la diputada no adscrita María Cuesta. En esta cuestión, el PSOE (10 votos) finalmente optó por la abstención.
El ‘Plan Provincial de Cultura’, de cuyo contenido, en rigor, no se habló demasiado, ha sido confeccionado por el Servicio de Cultura de la Diputación con la intención de convertirse en la ‘hoja de ruta’ del departamento, en principio hasta el año 2020, si bien en su texto se plantean también proyectos a medio y largo plazo.
Dueñas concedió el título de ‘proyecto estrella’ del mencionado Plan a la creación de la Escuela Provincial de Música, una iniciativa que calificó de “ambiciosa” y cuya finalidad última es la de “ofrecer a los chavales de la provincia la posibilidad de adquirir conocimientos musicales”. Reconociendo que el cronograma de la idea es todavía incierto (“vamos a ir poco a poco; no se pondrá en marcha este año”), la diputada de Cultura sí avanzó que la Escuela Provincial de Música ofrecerá una formación no reglada, agregando que contará con sedes en varias comarcas, aún sin definir.
En otro orden, anunció que el documento contempla “una apuesta muy importante del teatro Juan Bravo por el público joven”. A ese segmento del público irá dirigida la programación de la pequeña sala de conciertos existente en el Juan Bravo y el aula formativa creada en el mismo edificio.
Otras de las novedades de su departamento incluidas en el Plan serán la concesión de una beca de artes plásticas para jóvenes y la creación de una app para bibliotecas y bibliobuses, herramienta que se diseñará “para tener un contacto directo con los lectores”.
Novedades aparte, el Plan busca consolidar algunos de los programas puestos en marcha en los últimos años por el departamento de Cultura, como el dedicado a dar a conocer el patrimonio de los pueblos. De igual forma, el Plan persigue mejorar algunos de los servicios tradicionales de la Diputación en materia de Cultura. Sobre este último punto, Dueñas destacó los cambios habidos en los bibliobuses, que a partir de ahora únicamente descansarán un mes al año. El Plan que ayer recibió el visto bueno de la corporación incluye un anexo dedicado a las infraestructuras culturales de la provincia, trabajo realizado a modo de diagnóstico para conocer dónde se sitúan los espacios susceptibles de acoger actos culturales.
El debate sobre el Plan, en el pleno de ayer, se desvió hacia cuestiones no de fondo sino relativas al sentido del voto de cada grupo político. En las negociaciones previas a la sesión de ayer, el PSOE consiguió que el Plan —inicialmente denominado ‘de Cultura y Juventud’— se quedará como ‘de Cultura’, obteniendo el compromiso de que más adelante, aunque sin fecha establecida, se abordaría un proyecto de Juventud. Sin embargo, el anuncio del portavoz de los socialistas, Alberto Serna, de que su grupo finalmente se abstendría cayó mal entre los populares. De hecho, el presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, llegó incluso a amenazar con votar el primigenio ‘Plan de Cultura y Juventud’. La queja del representante de UPyD hizo reconsiderar la postura de los populares, quienes finalmente, “por respeto” a los grupos minoritarios, aceptaron separar los planes de Cultura y Juventud.
