El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, pronunció ayer un discurso en el Gran Teatro Alicia Alonso de La Habana en el que realizó una firme defensa de los derechos y las libertades e instó a su homólogo cubano, Raúl Castro, a no temer “las voces diferentes del pueblo cubano”. “No debe tener miedo de una amenaza de Estados Unidos ni debe temer las voces diferentes del pueblo cubano”, afirmó el líder norteamericano en un discurso transmitido en directo por la televisión cubana.
De esta forma, Obama fue un paso más allá y abogó incluso por una reforma política. “Los votantes deberían tener la capacidad de elegir a sus gobiernos en elecciones libres y democráticas”, sostuvo ante un auditorio repleto. “No todo el mundo está de acuerdo conmigo en esto, pero creo que los Derechos Humanos son universales. Creo que son los derechos del pueblo estadounidense, del pueblo cubano y de todos los pueblos del mundo”, destacó.
Sin embargo, el presidente norteamericano recalcó que el futuro de Cuba está en manos de sus ciudadanos. “Depende de vosotros”, subrayó, “yo he venido a tender la mano de la amistad, a quemar los rescoldos” de la Guerra Fría en América, incidió. Así, dentro del margen de maniobra de Estados Unidos, insistió una vez más en la necesidad de que el Congreso se coordine con la Casa Blanca para derogar el bloqueo comercial, económico y financiero impuesto a Cuba en la década de 1960.
“Llamamos al Congreso a que ponga fin al embargo”, reiteró. “Me preguntan por qué ahora, porque lo que estamos haciendo no está funcionando”, respondió. En esa línea, Obama consideró que “hay que tener el valor de reconocer que es una política de aislamiento que solo afecta al pueblo cubano, no al Gobierno”. Hasta entonces, se comprometió a continuar con las medidas ejecutivas para flexibilizar el embargo y mejorar paulatinamente las condiciones de vida de los cubanos, lo que mereció un estruendoso aplauso del público.
Anteriormente, Barack Obama, mantuvo una reunión con empresarios en la capital cubana, encuentro en el que el mandatario les trasladó que Estados Unidos “quiere ser su socio”. En este sentido, aseguró que las nuevas medidas entre ambos países podrían ayudarles a abrir y expandir sus negocios. “Vamos a hacer cambios entre los dos países y eso les ayudará a lograrlo”, señaló Obama, que se refirió directamente al arte cubano y a los famosos “cigarros” de la isla.
En este encuentro con emprendedores cubanos, el mandatario estadounidense halagó a los cubanos por lograr mantener los antiguos coches conocidos como ‘almendrones’ funcionando después de tantos años, tal y como informó la cadena estadounidense Univision. En este contexto, se mostró a favor de ayudar a los cubanos a “importar equipo e insumos de otros países”, al tiempo que se permite a estadounidenses adquirir productos producidos en la isla. “Creemos en la gente cubana”, agregó el jefe de Estado norteamericano.
Asimismo, Obama anunció que el Gobierno cubano permitirá a compañías estadounidenses como Cisco, Marriott y Starwood entrenar a los cubanos en temas de tecnología y hospitalidad. En esa línea, durante la reunión tomaron la palabra varios empresarios cubanos, a los que Obama animó a “expandir” sus negocios.
El lunes, Obama, el primer presidente estadounidense en aterrizar en la isla de Gobierno comunista en 88 años, aseguró que las diferencias entre los dos países en materia de Derechos Humanos y democracia son el principal escollo para sellar el acercamiento entre ambos países. Por su parte, Castro se quejó de la manipulación política del tema.
