El programa de acompañamiento social a familias en situación de exclusión residencial en Segovia desarrollado por la Fundación Secretariado Gitano (FGS) entre 2006 y 2011 ha sido merecedor del Premio Internacional de Buenas Prácticas de Naciones Unidas, anunciado en Dubai.
El organismo internacional destaca con la categoría de ‘Good’ esta iniciativa que hizo posible que 145 personas, un 47% de ellas menores de edad, dejaran las chabolas en las que vivían y pasaran a incorporarse a una vivienda normalizada en un entorno inclusivo en colaboración con el Ayuntamiento de Segovia y la Consejería de Familia de la Junta.
El 11 de junio de 2010 se derrumbaron las dos últimas infraviviendas del asentamiento de El Tejerín que aún quedaban en pie. Y finalmente el 30 de diciembre de 2011, con el derribo del último prefabricado en Carretera de Madrona, se puso fin a más de 30 años de chabolismo en Segovia durante los cuales decenas de familias gitanas “vivieron segregadas y sin las mínimas condiciones de habitabilidad, condenas a la exclusión”, afirmaron desde la Fundación de Secretariado Gitano de Castilla y León.
El Premio Buenas Prácticas de Dubai Internacional, creado en 1995 ha recibido durante los últimos 9 años más de 6.000 candidaturas de más de 150 países. La categoría ‘Un habitat’, en la que se ha destacado el programa de realojo de Segovia, premia las mejores iniciativas a nivel mundial que contribuyen a mejorar las condiciones de vida de la humanidad, fortalecen la conciencia de la sociedad y promueven políticas adecuadas para mejorar las condiciones de vida de los ciudadanos desde la perspectiva del desarrollo sostenible, reconociéndolas y difundiéndolas.
Además, la designación de ‘Good’ implica que que el ‘Programa de acompañamiento social a familias en situación de exclusión residencial’ de la FSG de Castilla y León aparecerá en el Décimo Catálogo Español de Buenas Prácticas que realiza el Ministerio de Fomento, y se incorporará a la biblioteca de Ciudades para un Futuro más Sostenible.
Además, este año el Banco Mundial, también se fijó en este programa, enviando a una consultora del mismo, para conocer de primera mano esta iniciativa.
En el programa de realojo se optó por un sistema de recuperación de viviendas municipales como residencia provisional, y el alquiler de viviendas privadas en mercado libre con el reto de que fuese un entorno facilitador para la incorporación social.
