El Centro Solidario de la localidad sufrió hace varios días un asalto a su propiedad, en el que fueron sustraídas varias octavillas que son utilizadas en las recogidas de alimentos que vienen realizando sus miembros a la puerta de varios supermercados.
Con esa información, algunos vecinos advirtieron al centro de que se estaban usando para solicitar dinero y “apoyar económicamente a las familias afectadas por la crisis”.
Desde el Centro Solidario han querido denunciar esta acción, aclarando que sus colaboradores “no van puerta por puerta solicitando dinero”; “las aportaciones de alimentos o ropa se recogen en el Centro Solidario, situado en el número 3 de la Plaza de la Huerta Herrera, o en las mesas informativas que se emplazan cada dos semanas, jueves y sábados, a las puertas de los supermercados El Árbol y Mercadona”.
Han rogado la difusión de la noticia incluso a nivel comarcal para alertar a los vecinos de que si alguien se presenta en su nombre, se trata de una estafa. Solicitan también que se denuncie el hecho ante las autoridades para atajar el problema e identificar a los sujetos.
“La suplantación de la identidad de un colectivo para fines perversos es un delito grave, y en este caso, éticamente aún más despreciable”, señalan.
Los miembros del Grupo 15-M Cuéllar y del Colectivo que conforma la Red de Solidaridad Popular aseguran estar acostumbrados “a luchar contra la gran estafa, que insisten en llamar crisis”.
Afirman también que no van a permitir que la imagen y honorabilidad del colectivo “sea usurpada o dañada por otros colectivos o individuos con intereses bastardos”, por lo cual han puesto en aviso a toda la población.
