Hace poco más de un mes, el presidente de la Diputación, Francisco Vázquez, firmó un convenio de colaboración con el secretario general de GREFA, Fernando Garcés Toledano, por el que la institución provincial concedía 15.000 euros a esta entidad conservacionista para llevar a cabo en Aldea Real y Escalona del Prado el programa de control biológico de topillos. “Segovia era un provincia en la que todavía no habíamos implantado el programa —señalaba ayer Garcés—, por lo que nos hizo mucha ilusión que la Diputación decidiera apoyar nuestra iniciativa”.
Garcés recordó que el control biológico del topillo no es un invento español; “es algo que ya se lleva años haciendo en muchísimos sitios del mundo, como Alemania, Francia, Israel o Vietnam”. Con respecto a los resultados, el secretario general de GREFA recalcó que “está más que demostrado que este sistema es eficaz”, para agregar a renglón seguido su convencimiento en que “es la única alternativa eficaz al uso de venenos”. A modo de ejemplo, Garcés señaló que una pareja de lechuzas comunes captura cerca de 900 topillos durante la época de cría de sus pollos, y una cifra similar se registra en el caso de los cernícalos vulgares.
En contraposición a este control biológico del topillo, GREFA coloca las medidas que se tomaron en 2007, cuando “se utilizaron toneladas de veneno, concretamente dos tipos de anticoagulantes, clorofacinona y bromadiolona” que “tuvo consecuencias para otras especies” diferentes al topillo. Así, GREFA lamenta que el veneno fue consumido por especies granívoras, muchos de cuyos ejemplares “fueron apareciendo muertos en los campos”.
Objetivos
Entre los objetivos del programa que ahora impulsa GREFA figura, en primer lugar, aumentar la densidad de rapaces depredadores del topillo. A medio plazo, este colectivo conservacionista pretende analizar las consecuencias ecológicas de este incremento de depredadores sobre sus presas y evaluar la eficacia de la medida.
Por último, GREFA espera realizar una campaña de sensibilización y educación ambiental en colectivos agrarios, cinegéticos y colegios sobre los beneficios que otorgan los ecosistemas en buen estado de conservación.