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Iconos de una cultura cercana

por Redacción
17 de diciembre de 2014
El vicario castrense coronel Ramón García Guardado y el director de la Academia de Artillería

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Una muestra que acerca una cultura tan cercana y tan desconocida como la bizantina, con la intención de abrir una puerta al conocimiento de la misma a través de la representación religiosa más característica de la iglesia ortodoxa, los iconos. Ese es el logro de la colección ‘Iconos’, en la sala de exposiciones temporales del Alcázar.

El general Alfredo Sanz y Calabria inauguró ayer por la tarde la exposición, en su condición de presidente del Patronato de la fortaleza segoviana, acompañado del autor de la misma, el vicario castrense coronel Ramón Luis García Guardado, y miembros del Patronato, además de miembros de la Real Academia de Historia y Arte de San Quirce, entre los que se encontraba su directo, Antonio Ruiz, y el anterior jefe de estudios de la Academia de Artillería, José Miguel de los Santos.

Sanz y Calabria explicó que la primera muestra que acogió dicha sala también fue de arte sacro “y aprovechando las fiestas navideñas pensamos que tenía sentido proponer otra de tema religioso”. Sin embargo, la colección de García Guardado representa un concepto muy distinto al de la representación de la religiosidad católica y sirve, en palabras del general, para entender cómo “el corazón de Europa”, esa zona en la que la parte occidental y oriental se diluyen, “tiene una importante trascendencia en el proceso de formación del pensamiento y cultura de todo el continente”.

El coronel García Cuadrado participó en misiones de paz en Kosovo y Bosnia Herzegovina, después de la ‘Guerra de los Balcanes’, que el director de la Academia de Artillería, calificó como “uno de los episodios más vergonzosos” de la historia reciente. Durante su estancia descubrió que los templos y monasterios habían sido expoliados y buena parte del arte sacro estaba a la venta en mercadillos, rastros y anticuarios, con lo que fue “recogiendo” las diferentes tablas y piezas.

Los iconos son representaciones, imágenes de figuras religiosas como Cristo y la Virgen, San Juan Bautista, San Jorge, o Santa Bárbara, así como autoridades religiosas, o historias sagradas, que se realizan sobre tabla a la que se aplica una base de estuco, se traza el dibujo y se extienden capas de color, en el que cada tono tiene su significado. Las figuras representadas ganan fuerza a través de la utilización de oro en los fondos, plata en sus marcos y, en ocasiones, pedrería ornamentándolo.

Lo más característico es que la técnica apenas ha variado desde el siglo VI y se manifiesta en todo su esplendor en el iconostasis de los templos, “lo que para los católicos es el retablo del altar”, aclaró el vicario castrense, aunque la posibilidad de contemplar el medio centenar de piezas de la exposición, algunas datadas en los siglos XVII, XIX y XX, pone de manifiesto esa involución que la convierte en única.

Entre los iconos del vicario licenciado en Estudios Eclesiásticos y en Ciencias Catecáticas figuran algunos de pequeños tamaño, que formaban parte de los altares de metal o relicarios familiares, “que se tenían en los hogares—según comentó—, así como pequeños iconos que se llevaban en el bolsillo o la cartera”.

La muestra que este año ha sido expuesta en Valladolid y Barcelona, sumando más de 9.000 visitas, será gratuita para los segovianos y permanecerá en la sala del Alcázar hasta el 18 de enero. “Un sitio muy especial y distinto, con un ambiente exclusivo y muy bonito”, afirmó García Guardado.

«Necesitados de diálogo».- El vicario castrense coronel Ramón García Cuadrado nació en Nubledo (Corvera de Asturias) en 1957 y cursó sus estudios eclesiásticos en el Seminario de Oviedo. Fue ordenado sacerdote en 1982 y poco después se incorporó al Servicio Militar. A lo largo de su carrera en el Ejército ha desempeñado su labor en Granada, Córdoba, Jerez de la Frontera, Tenerife y Badajoz y en 2013 se incorpora como vicario castrense en Valladolid. Desde 1997 ha participado como capellán castrense en misiones internacionales en Bosnia-Herzegovina, Afganistán, Irak, Kosovo y Líbano.

García Cuadrado es el último capellán castrense del Ejército de Tierra y aunque próximo a alcanzar la edad en la que podría pasar a la reserva, confiesa que “permaneceré en activo unos años más”. El vicario explica que su labor en misiones internacionales “ha sido muy bonita, con momentos que te marcan, con la posibilidad de entrar en contacto con la población civil, otras iglesias y autoridades religiosas”.

No duda al señalar Irak como el destino en el que vivió “las situaciones más duras” y se muestra pesimista con respecto a la situación actual de oriente medio. Sobre el atentado talibán a una escuela en Pakistán ayer, en el que murieron 137 niños, señala que “desde 2002 la situación no deja de agravarse. Es una zona necesitada de diálogo, como si fuese una familia, en la que si no hay diálogo y entendimiento, el efecto inmediato es la ruptura”, apuntó.

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