La Dirección General de Tráfico (DGT) inicia hoy, 7 de junio, una campaña especial de control de motocicletas. La iniciativa, que se desarrollará hasta el próximo 13 de junio, se centrará tanto en la velocidad y la alcoholemia, como en el uso del casco y la documentación. La subdelegada del Gobierno, María Teresa Rodrigo, señaló que «el exceso de velocidad, el consumo de alcohol y no usar el casco influyen decisivamente en los accidentes de tráfico y en sus consecuencias». Así, pidió a los conductores «responsabilidad y que no asuman riesgos por llegar antes o por circular habiendo consumido alcohol».
Uno de los aspectos en los que se centró la subdelegada fue en que «el riesgo de sufrir una lesión cerebral se multiplica por tres si el conductor o el pasajero de la motocicleta no lleva puesto el casco». Hay que señalar, dijo, que no llevar casco incrementa el riesgo de lesión en la cabeza, la severidad de las lesiones de cabeza, el tiempo en hospital y la probabilidad de muerte como consecuencia de lesiones en la cabeza. Mientras, con el uso del casco, la probabilidad de salir ileso del siniestro aumenta en un 20%; y tres de cada cuatro motoristas que fallecen, lo hacen a consecuencia de heridas en la cabeza. Además, no llevar casco puede suponer 200 euros de multa, tres puntos e inmovilización del vehículo.
Otro de los aspectos a los que hizo referencia la subdelegada fue en que el parque de motocicletas en la provincia supera las 5.500, cifra que se incrementa cada año, «por lo que cada vez hay más motos y ciclomotores en las carreteras, que deben convivir con el resto de automóviles, y a la inversa».
