El monumento romano, con la magia de la iluminación, se tiñó ayer de rosa por una buena causa: la de sensibilizar a la población sobre el abuso y discriminación que sufren millones de niñas en el mundo. Con motivo del Día Internacional de la Niña 2014, el Acueducto y decenas de monumentos emblemáticos en España y en el se mostraron en color rosa. “Plan Internacional” organiza diferentes actuaciones en el marco de esta efeméride con el objetivo de dar a conocer la realidad que viven las niñas —»las pobres entre los pobres», dice la organización— y establecer los pasos y herramientas para acabar con la discriminación de género a través de la educación y el empleo.
