No quitaban ojo de lo que Pablo Zamarrón, experto músico y folclorista, les mostraba. Un nutrido grupo de niños segovianos asistió ayer a uno de los laboratorios de creatividad ciudadana organizados por la Concejalía de Cultura dentro del programa de verano ‘Segovia Ciudad Educadora’. Por las manos de Zamarrón, y de los niños, pasaron instrumentos tradicionales, antiguos, viejos para los más jóvenes, pero que llenaron de sonidos el parque de los Deportes, en la zona de El Peñascal, desde las once de la mañana.
La mayor parte de los numerosísimos instrumentos que el experto en música tradicional desplegó ayer en este taller infantil eran de percusión: tambores, tamboriles, panderetas, zambomba, tablillas, tejoletas, castañuelas, huesera, carrañaca, mirlitón, carrasca, carracas, matraca, cencerros, cuerno… y hasta una botella de anís, un caldero o trozos de un plato de cerámica. También sonó uno de viento, la dulzaina.
Como el propio Mazarrón explicó a los niños, asombrados por los sonidos que conseguía de algunos de esos objetos, hombres y mujeres se han servido a lo largo de la historia, “cuando no había reproductores de mp3”, del reciclaje “de cualquier cosa” para producir sonidos con los que acompañar sus cantes. Los pastores y los agricultores son un buen ejemplo, con utensilios de su trabajo diario, que han evolucionado hasta convertirse en instrumentos, de percusión en la mayoría de los casos.
Para rematar, los niños asistentes, en general muy participativos y atentos, aprendieron a hacer dos pequeños pero sorprendentes instrumentos tradicionales: mirlitón y carrasca, que pudieron llevarse a sus casas.
BUENA ACOGIDA POR LAS FAMILIAS
Procedentes de varios barrios, las familias con niños que están participando en campamentos, talleres, laboratorios de creatividad ciudadana, etc. “nos han hecho llegar muchos mensajes de felicitación”, aseguró ayer Luquero mientras en el parque de los Deportes (en la zona de El Peñascal del barrio de La Albuera, se celebraba uno de los talleres-laboratorios de creatividad ciudadana.
La alcaldesa recordó que el programa de Segovia Ciudad Educadora para el verano, que comenzó el mes pasado y continúa en agosto, incluye más de cincuenta actividades, con más de 2.000 plazas, “que prácticamente se han cubierto todas”.
Además de informar de que este ha sido el comienzo pero el programa continuará “puntualmente” a lo largo del año y con voluntad de aumentar las actividades por parte del Equipo de Gobierno municipal, Luquero sostuvo que ha sido una forma de que los niños de familias que no pueden salir de vacaciones, o que han tenido unos días en julio, pero no en agosto, o al contrario, “tengan un ocio educativo pero divertido en su ciudad”.
Para la principal autoridad de la ciudad “la Educación es básica, es lo que verdaderamente transforma las sociedades y desarrolla a los seres humanos. Segovia puede tener un marchamo de ciudad educadora que trabaja con los niños y estimula su creatividad”.
