Desde hace cuatro años la organización del Festival Internacional de Títeres está lastrada de alguna manera por un déficit que su director, Julio Michel, calcula en aproximadamente 35.000 euros. Una de las soluciones pasa “por diversificar y buscar patrocinadores nuevos”, explica, al tiempo que valora las aportaciones de instituciones públicas y de Bankia.
Destaca el apoyo económico del Ayuntamiento de Segovia, con la “seguridad” que ofrece la firma de un convenio plurianual, “la forma más sensata de trabajar para nosotros”, según Michel, así como el esfuerzo de la Diputación en los últimos años. Cuenta el director del festival que todavía no se ha alcanzado el nivel que había hace diez años “pero se está incrementado la aportación económica año tras año, con una relación y una actitud muy favorables”.
Recalca también que la aportación de la Junta de Castilla y León es otro de los apoyos en los que se asienta Titirimundi aunque, al mismo tiempo, añade que “podría implicarse más, porque es un acontecimiento cultural, educativo, turístico, con las repercusiones económicas que eso conlleva, de primer orden en la región”. Dice Michel que en la Consejería de Cultura y Turismo “hay interés pero yo pido un poco más; se nota que cuando había una consejera segoviana, que conoce muy bien el festival, se obraba en consecuencia”.
Además trabaja para conseguir un posible gran patrocinador privado en las próximas ediciones.