Mientras Enrico Letta, el primer ministro designado por Giorgio Napolitano para conformar un Gobierno en Italia, continuaba con su ronda de conversaciones para intentar alcanzar alianzas, Silvio Berlusconi seguía postulando a su partido como el mejor socio que se pueda tener para cerrar un Ejecutivo, en el que, según agregó, él no estará.
Letta, que se ha encontrado con la oposición de la mayoría de los grupos políticos, tendrá que decidir ahora si pactar con Il Cavaliere. Más aún teniendo en cuenta que el líder de centro-izquierda ha reconocido que hay «diferencias significativas» con los conservadores. Una situación que el expremier zanjó con un «no hay verdaderos problemas».
Según explicó el jefe de Pueblo de la Libertad (PDL), «no se ha hablado ni de ministerios de ni nombres, sino de cosas que hacer». Es más, insistió en que «ha habido un comportamiento muy positivo», por lo que se mostró convencido de que se llegará a un consenso. «Ciertamente, no podemos pretender estar de acuerdo al 100 por 100», agregó.
Tal y como desveló el exdirigente, en su encargo de formar Gobierno, Napolitano habría dado instrucciones a Letta para que haya «miembros de nueva generación con una notable presencia de mujeres».
«Esto excluye al que suscribe, que, no obstante, nunca ha querido entrar en él», indicó. «Si me hubieran llamado para un cargo, dado que he preparado el programa de la campaña electoral, si me hubieran necesitado habría estado dispuesto, pero lo prefiero así», aseveró.
Berlusconi aseguró durante la campaña electoral y después de la misma que no quería ser primer ministro y que en realidad consideraba que era ser mejor ser ministro de Economía, ya que se tiene más poder. Posteriormente, se ofreció a no liderar a su coalición si con ello facilitaba la formación de un Ejecutivo.
Entretanto, Letta se reunió con el presidente en el Quirinale con el fin de informarle sobre el resultado de sus consultas, en las que pudo confirmar que contaría con el apoyo del PDL y de Scelta Civica, el grupo que respalda al primer ministro saliente, Mario Monti.
Precisamente, al término de este encuentro se trasladó al Palacio Chigi, sede del Gobierno, para entrevistarse con Monti.
Se espera que este fin de semana dé una respuesta definitiva.
