Hay fechas en el calendario que se graban a fuego en las memorias por su especial significado, por un hecho relevante que viene a cambiar una vida. A buen seguro que la mañana del 21 de abril quedará grabada a fuego en la memoria del segoviano Javier Guerra, que durante toda su vida recordará que, aquella agradable mañana en La Coruña, pasó en poco más de dos horas de debutante en la maratón, a campeón de España de la disciplina después de hacer una carrera simplemente extraordinaria.
El atleta del Bikila, de acuerdo con su preparador Antonio Serrano, tenía claro desde hacía tiempo que el futuro pasaba por dar el salto (gigante) de los 10.000 metros y las pruebas de campo a través, a la maratón. Y a ello se encaminó una preparación exigente casi hasta el extremo, con semanas de casi 200 kilómetros de preparación en una Segovia que ha vivido un invierno cruel para los atletas, con lluvia prácticamente de continuo.
Ambos, preparador y técnico, optaron casi en el último momento por renunciar a la maratón de Rótterdam, dicen que el lugar ideal para buscar una buena marca, para acudir al campeonato de España de la disciplina que acogía la bella ciudad de La Coruña. En el horizonte, un debut de 42.195 metros con la mirada puesta en rebajar el crono de 2h13’30 que daban derecho a participar con la selección española en el campeonato del mundo de maratón que se celebrará en agosto en Moscú. Al lado, otros 2.000 atletas, cada uno con sus sueños para la maratón.
Llegado el momento de la salida, el segoviano supo templar sus nervios, y colocarse en los primeros metros junto a su compañero de equipo, Javier López, imprimiendo desde el inicio un ritmo en pocos segundos superior a los tres minutos el kilómetro. Detrás comenzaban a quedar los principales favoritos, encabezados por un Pedro Nimo que llegaba a La Coruña con ganas de reivindicarse como el gran atleta que es.
Superado el kilómetro 21 en un tiempo inferior a la hora y siete minutos, Javi Guerra seguía firme, mirando al frente con ambición, tanto que su compañero tenía que ir aconsejándole que tratara de regular, que no lo gastara todo, que «El Muro» del kilómetro 30 se hace muy elevado cuando no tienes fuerzas…pero el hijo de Paco Guerra no tenía ojos más que para la línea de meta, porque cuando en el kilómetro 27 se quedó solo en cabeza, lo que hizo fue aumentar aún más su ritmo, sabedor de que la mínima estaba al alcance de la mano.
Por detrás, Pedro Nimo trataba de reaccionar, aumentaba su ritmo e incluso llegaba a colocarse a un puñado de segundos de «Guerrita». Pero cuando el segoviano rebajó su tiempo de paso por kilómetro, demostrando que el sufrimiento de los entrenamientos merece la pena en el momento de la verdad, nadie pudo siquiera acercársele. Así, Javi pudo entrar en la línea de meta emocionado, y aún así parando el crono en 2h12’20, más de un minuto por debajo de la marca mínima para participar en la maratón de Moscú. El paso de debutante a campeón fue de algo más de 42 kilómetros. Pero, sin duda, mereció la pena darlo.
“Ha sido el debut soñado”
Exultante por el grandísimo resultado conseguido, Javi Guerra hizo aflorar sus emociones: “Ha sido un debut soñado. Estrenarme en la maratón siendo campeón de España, y además logrando la mínima para el Campeonato del Mundo de Moscú, ha sido toda una alegría para mí”.
Todo le salió a pedir de boca al segoviano, puesto que la carrera “se ha desarrollado tal y como tenía planeado. Mi amigo y compañero Javier López Villarrubia, vino a echarme una mano en torno al kilómetro 25, marcándome muy bien el ritmo hasta el kilómetro 27. A partir de ahí afronté solo el resto de la prueba, pero me encontré muy bien, he ido cada vez más rápido y las sensaciones fueron muy buenas. Por ello quiero agradecer la ayuda de López Villarrubia, que ha sido fundamental para este triunfo. En cuanto a la jornada, hemos tenido mucha suerte, ya que la temperatura ha sido muy buena para correr (entre 8 y 12 grados), con viento moderado y sin lluvia”.
Este éxito viene a compensar el gran trabajo de preparación llevado a cabo por Guerra, ya que el salto del cross a la maratón siempre es duro: “La preparación ha sido muy dura y exigente, con semanas de entrenamientos con 180-190 kilómetros. Por ello he tenido que sacrificar muchas cosas, preparándome a la sombra. Pero, afortunadamente, el trabajo ha dado sus frutos, y este campeonato de España de maratón me ha devuelto en forma de una alegría inmensa todo este sacrificio”.
¿Y ahora? Javi Guerra lo tiene claro, “a partir de ahora lo que me toca es recuperar bien, descansando dos semanas, ya que está siendo una temporada muy fuerte. Poco a poco iré buscando objetivos, puesto que el Mundial de agosto está a la vuelta de la esquina, pero tengo que sentarme a hablar con mi entrenador y ya decidiremos cuál va a ser el plan hasta entonces.
