El torneo de Wimbledon vivió ayer una nueva sorpresa de enormes magnitudes con la eliminación de Roger Federer en la segunda ronda. El suizo, siete veces campeón en el All England Club, cayó ante el ucraniano Sergiy Stakhovsky por 6-7, 7-6, 7-5 y 7-6 en tres horas de juego que quedarán guardadas en la historia del tenis.
Dos días después de la eliminación de Rafa Nadal en primera ronda, el mundo del tenis asistió perplejo a un nuevo impacto monumental. Considerado por muchos el mejor tenista de todos los tiempos y rey indiscutible en la hierba de Wimbledon, el de Basilea no perdía tan temprano en un ‘grande’ desde 2004.
Pese a recuperar un ‘brask’ abajo en la cuarta manga y a disponer de un punto de set para llevar el encuentro al quinto parcial, el helvético nunca encontró el punto debil de un rival que terminó festejando el triunfo de rodillas en la catedral del tenis.
Por otro lado, los españoles Nicolás Almagro, Fernando Verdasco y Tommy Robredo se metieron ayer en la tercera ronda de Wimbledon después de ganar a los franceses a Guillaume Rufin, Julien Beneteau y Nicolas Mahut.
El primero en firmar su pase fue el levantino, que se deshizo en cuatro sets de Guillaume Rufin por 7-5, 6-7, 6-3 y 6-4 en un envite donde solo cedió dos veces su saque, logró hasta 21 saques directos y 55 golpes ganadores, por tan solo 17 errores no forzados.
Así, pese a no ser un consumado especialista en hierba, Almagro supo jugar sólido y ofrecer pocos resquicios a su rival. El español empezó bien, con rotura, pero el francés lo recuperó antes de ver como el murciano quebraba nuevamente en el undécimo para evitar la siempre imprevisible ‘muerte súbita’ y ponerse por delante.
El segundo parcial fue más cerrado. Ambos volvieron a intercambiar buenos golpes y, esta vez, Rufin aguantó hasta el ‘tie-break’ que se adjudicó antes de salvar una bola de set en contra.
A partir de ahí, el dominio fue mayor del murciano, que ya no solo no volvió a ceder su saque, sino que ni siquiera le dio una posibilidad a su contrincante.
Mientras tanto, Fernando Verdasco tuvo que lubregar ante el peligroso Julien Benneteau, al que derrotó tras un choque cerrado por 7-6, 7-6 y 6-4. El español volvió a rayar a un buen nivel, gozando de un buen saque (15 ‘aces’) y mostrándose también demoledor en sus golpes ganadores (55). El zurdo se afianzó respecto al saque, con el que apenas pasó apuros y que solo perdió en la tercera manga cuando su adversario ya estaba muy presionado tras caer en las dos ‘muertes súbitas’.
El último en completar el triple ante los ‘bleus’ fue Tommy Robredo, quien parece haber renacido tras sus remontadas inhumanas en Roland Garros. El de Hostalric se deshizo de Nicolas Mahut por 7-6, 6-1 y 7-6 en un choque que destacó por la fortaleza desde el fondo de la pista. El ‘tie break’ de la primera manga desmoralizó a su rival, que se desconectó del duelo en el segundo. En el tercero y definitivo, la ‘muerte súbita’ volvió a ser la mejor aliada del gerundense.
Además, el belga Steve Darcis, que protagonizó el pasado lunes la gran sorpresa al eliminar en primera ronda a Rafa Nadal, se ha retiró antes de su siguiente encuentro por una lesión en el hombro.
Otro que tampoco pudo continuar fue Jo-Wilfred Tsonga, que abandonó mientras jugaba ante Gulbis. La retirada del galo supuso un mazazo en una infausta jornada, la primera en la historia de la era ‘open’ en la que se retiraron siete jugadores, ya que se unió a Cilic, Darcis, Hewitt, Azarenka, Wozniacki e Ivanovic.
