La selección española de baloncesto aplastó sin contemplaciones a una frágil Polonia, a la que castigó con un demoledor 53-89, y está virtualmente clasificada para la siguiente ronda del Eurobasket de Eslovenia, tras la disputa del cuarto partido de la primera fase de grupos celebrado ayer en el Celje Arena.
A pesar de la debilidad del rival, la escuadra de Juan Antonio Orenga salió a la cancha a cuajar un partido serio y, prueba de ello, es el correctivo que endosaron a su contendiente en el primer cuarto del duelo: 5-25. La selección estuvo brillante en el rebote en los primeros compases del encuentro antes las torres polacas y eso facilitó mucho el ataque y la posterior distancia en el marcador, dado que el combinado centroeuropeo prácticamente no anotó. De hecho, hasta pasados los cinco minutos del enfrentamiento, los polacos no consiguieron inaugurar su marcador.
Mientras, España empezó con un prometedor parcial de 0-8 y mató a sus adversarios al final del cuarto con tres triples consecutivos de José Manuel Calderón, Rudy Fernández y Sergio Rodríguez que pusieron una ventaja de 20 puntos para empezar el segundo período.
Con el viento a favor, la selección no bajó ni un ápice su ritmo demoledor y siguió castigando a la débil Polonia con una defensa asfixiante y un gran acierto anotador. Hasta Marc Gasol se atrevió a probar, con éxito, desde la línea de 6,25. Nadie quería perderse la fiesta anotadora y se llegó al descanso con un contundente 13-49.
Tras el descanso, el combinado de Dirk Bauermann mejoró y trató de maquillar un poco el resultado con dos triples consecutivos. La ‘ÑBA’, sabiéndose ganadora y viendo que el triunfo estaba hecho, se relajó un poco en defensa. Aun así, en cuanto volvió a pisar el acelerador volvió a abrir una considerable brecha en el luminoso del pabellón de Celje.
El último cuarto fue un mero trámite en el que el único aliciente era saber si la selección superaría el récord de 43 puntos de ventaja que le endosó, también, a Polonia en el Europeo de 1997 en Badalona. Al final no pudo ser, pero el que sí superó su registro de anotación fue Ricky Rubio, que nunca había pasado de los 14 puntos con el combinado nacional y firmó 15.
Además de la cómoda victoria, la mejor noticia para España fue que el equipo haya recuperado las buenas sensaciones en ataque. De hecho, hasta cinco jugadores hicieron dobles dígitos y Marc volvió a ser importante en la faceta anotadora, logrando 15 tantos.
Con este resultado, la escuadra de Orenga pone pie y medio en la siguiente ronda. Aún así, el cuadro nacional quiere cerrar la primera fase de la mejor manera posible y, para ello, espera ganar hoy a Georgia. Polonia, por su parte, dice adiós a las remotas opciones que tenía y jugará los dos partidos que les faltan sin la presión del resultado.
