La fecha de inicio del Cónclave que elegirá al sucesor de Benedicto XVI se conocerá la próxima semana, después de que hoy comiencen a reunirse las congregaciones generales.
El decano del Colegio cardenalicio, Angelo Sodano, remitió el aviso a los miembros del centro, que actualmente son 208, y que señala que el día inicial se realizará la primera Congregación General a las 09,30 horas en el Aula Pablo VI en la Sala del Sínodo de los Obispos y que está prevista, asimismo, una segunda cita, por la tarde, a las 17,00, en el mismo lugar.
En todo caso, el Vaticano da por seguro que la fecha no se fijará hoy sino en jornadas posteriores, dado que los purpurados tienen que analizar múltiples aspectos y estarán a la espera de que todos los cardenales electores lleguen a Roma.
Durante este periodo de Sede Vacante, la Iglesia Universal se queda sin cabeza visible y serán el camarlengo, Tarcisio Bertone, y el Colegio de Cardenales los que se encarguen del Gobierno del Vaticano.
Así, los mitrados podrán encargarse del despacho de los asuntos ordinarios o los inaplazables, así como de la preparación de lo necesario para la elección del nuevo Pontífice. Concretamente, se formarán dos clases de reuniones, una general, formada por todo el Colegio, que se encargará de los asuntos más importantes, y otra particular integrada por el camarlengo y por tres purpurados extraídos por sorteo, que se ocupará de los temas ordinarios, según precisó ayer la Constitución Apostólica Universi Domini Gregis.
En las primeras asambleas todos los cardenales deberán prestar juramento de observar las disposiciones contenidas en la Constitución Apostólica y de guardar el secreto. «Prometemos, nos obligamos y juramos, todos y cada uno, observar exacta y fielmente todas las normas contenidas en la Constitución apostólica Universi Domini Gregis del Supo Pontífice Juan Pablo II, y mantener escrupulosamente el secreto sobre cualquier cosa que de algún modo tenga que ver con la elección del Romano Pontífice», leerá Sodano delante de todos. A continuación, cada mitrado contestará: «Yo prometo, me obligo y juro», poniendo la mano sobre los Evangelios.
En una de las Congregaciones inmediatamente posteriores, deberán decidir, entre otros asuntos, el sorteo de las habitaciones en la Domus Sanctae Marthae, la preparación de la Capilla Sixtina, confiar a dos eclesiásticos de clara doctrina el encargo de predicar a los cardenales dos ponderadas meditaciones sobre los problemas de la Iglesia en este momento, cuidar de que sea anulado el anillo del Pescador y fijar el día y la hora del comienzo de las operaciones de voto.
De este modo, el Cónclave comenzará en la fecha establecida por los asistentes. Durante este tiempo, los electores no podrán mantener correspondencia epistolar, telefónica o por otros medios, como las redes sociales.
