Las unidades de gestión clínica empujarán a los enfermos crónicos y con varias patologías fuera de la red pública de Sanidad para centrar su atención en los usuarios más jóvenes cuya asistencia requiere menor inversión, según el análisis que realiza la Federación de Sanidad y Servicios Socio-Sanitarios de Comisiones Obreras (CCOO) de Castilla y León sobre el nuevo modelo organizativo que impulsa la Consejería de Sanidad.
CCOO de Segovia se opone radicalmente a las unidades de gestión clínicas por entender que suponen el desmantelamiento del sistema público de salud y su privatización, según pusieron de manifiesto ayer los representantes de Acción Sindical de la Federación Regional de CC.OO de Sanidad y Servicios Socio Sanitarios, Luis Carlos Ramón Carreira y Nicolás Díez Riaño y María Antonia Sanz Martín, responsable provincial de Sanidad de CCOO. Los representantes sindicales defendieron con distintos argumentos que el modelo encaminado a dotar de mayor autonomía a los servicios sanitarios para su organización y gestión responde a criterios economicistas, premia con incentivos a los profesionales que cumplan los objetivos marcados, a través de recortes de recursos y personal y discrimina a los pacientes empujando a las personas mayores, enfermos crónicos y a los pluripatológicos fuera del sistema sanitario público. “Quiere crear unidades elitistas donde solo se atienda a usuarios rentables”, señaló Nicolás Díez Riaño, quien incluso llegó a hacer referencia a una futura catalogación de ‘servicios de marca blanca’ y otros con marca propia y de carácter semi-privado. Según explicó en rueda de prensa Luis Carlos Ramón Carreira lo que pretende la Junta es pasar de una macrogestión de los hospitales a una microgestión donde cada uno de los servicios pasarían a ser microempresas con capacidad para gestionar a las plantillas, los horarios de entrada de los profesionales, la compra de productos y gestión de la clínica.
Este modelo, según Ramón Carreira, convierte a los médicos en “mini-empresarios”, y presentará problemas éticos porque para poder ahorrar y cumplir objetivos tendrán que aplicar recortes “en cuanto el número de intervenciones, número de pruebas diagnósticas, o tener menos días a los pacientes ingresados”.
Los representantes de CCOO dan un giro a las cuentas y llegan a asegurar que implantar unidades de gestión clínica en el conjunto del área de salud de Segovia, contando con los centros de salud y el Hospital General, requiere un coste de más cinco millones de euros destinado al pago de incentivos. “Con ese dinero se podrían contratar a 167 trabajadores”, indicó Ramón Carreira precisando que en la lista ficticia de incorporaciones habría 82 médicos, más de 50 enfermeros, 20 auxiliares de enfermería y 14 celadores y administrativos.
La Federación de Sanidad de Comisiones Obreras celebró ayer dos asambleas informativas dirigidas a los trabajadores del Área de Salud de Segovia para debatir sobre las unidades de gestión clínica.