El pleno de la Diputación ha acordado hoy, por unanimidad, pedir a la Consejería de Educación de la Junta el mantenimiento de la ESO Rural en la provincia, tal y como reclamaba una moción presentada por el PSOE. El asunto apenas ha generado debate en el pleno, ya que el portavoz del PP, José Antonio Sanz Martín, ha mostrado su apoyo a la propuesta socialista, de idéntica forma a la que manifestó el pasado año cuando se planteó la eliminación de la ESO Rural en Sacramenia, Abades, Olombrada y Vallelado.
El portavoz de los socialistas, José Luis Aceves, ha insistido en que ahora, cuando se pretende suprimir la ESO Rural de Riaza, Cantimpalos, Turégano y Navas de Oro, “los argumentos (en contra de la eliminación) son los mismos”, pidiendo a la Junta que valore los perjuicios que generará tanto a los alumnos como a sus familiares.
La decisión de la Diputación se trasladará a la Federación Regional de Municipios y Provincias, a las Cortes Regionales y al consejero de Educación.
Supresión pese a las protestas. Por su parte, el consejero de Educación de la Junta, Juan José Mateos, insistió hoy en que todos los primeros ciclos de Educación Secundaria Obligatoria se trasladarán el próximo curso a los institutos pese a las protestas de los padres de algunos de los alumnos afectados. “La ESO es un conjunto y nos conviene ordenarlo, que es lo que hemos hecho, estamos cumpliendo una ley y, pensamos y defendemos que los alumnos están mejor cada uno en la etapa que les corresponde”, remarcó Mateos, antes de participar en la presentación de la nueva administración electrónica de las universidades de Burgos, León y Valladolid.
Mateos insistió en que los escolares de Tercero y Cuarto de la ESO “se desplazan ya” y que “lo único” que está diciendo su departamento es “que con ellos vayan también los de Primero y Segundo” porque es mejor que estén en centros “preparados” para impartir esta etapa educativa. “Después hay un ahorro, evidentemente, que puede ser grande o pequeño dependiendo de las circunstancias de cada sitio”, reconoció el consejero, quien aseguró que no cree que con esta medida “se pierda población” en los municipios afectados.