El primer grueso de la selección española que competirá en los Mundiales de Atletismo, que darán comienzo en Moscú mañana, partió ayer a primera hora, «con ganas e ilusión» y sabedor de que «el nivel es muy alto» y que el objetivo principal es «estar a la altura», como reconoció uno de los capitanes de la expedición patria Mario Pestano.
Los atletas, liderados por el lanzador de disco, y el director técnico de la Real Federación Española de Atletismo (RFEA), Ramón Cid, posaron con una bandera de apoyo a la candidatura de Madrid 2020 antes de partir.
Así, aunque el pasado miércoles ya habían salido las primeras deportistas, la maratoniana Alessandra Aguilar y la obstaculista Diana Martín, fue ayer cuando se marchó el grupo más numeroso de los 40 seleccionados para la cita. Un segundo, con David Bustos, Ruth Beitia, los maratonianos y Jesús Ángel García Bragado, partirá el próximo lunes.
En este primer desplazamiento, sobresalían los nombres de algunas de las bazas más importantes para estar en las finales y pelear por alguna medalla, como el saltador de longitud Eusebio Cáceres, señalado por muchos como la mejor opción para el podio al llegar con la tercera mejor marca mundial del año, los marchadores Miguel Ángel López, quinto en Londres 2012, y Julia Takacs, el mediofondista Kevin López o la veterana Natalia Rodríguez, medallista de bronce hace dos años en Daegu (Corea del Sur) en 1.500 metros.
Y esta parte de la selección viaja con «ganas e ilusión» como reconoció Mario Pestano, que recordó lo difícil de la cita. «Un Mundial siempre es muy complicado para todos, el nivel es muy alto, hay muchísimo nivel y nuestros atletas son jóvenes, no hay que pedirles más de lo que se puede», aseguró.
El canario insistió en que las «medallas son muy complicadas». «Lo que sí se pide es estar a la altura, competir con la mayor ilusión y adquirir experiencia», indicó.
