Por lo menos el domingo pudimos ver el sol». Alberto Herreras, presidente de la Junta de Cofradías de la Semana Santa de Segovia se aferró al consuelo de la última jornada del Triduo Pascual en la que las cofradías pudieron participar de la «Procesión del Resucitado», una de las escasas actividades que no se vieron afectadas por la lluvia que ha asolado la capital durante todos los días de la Semana Santa.
El tiempo ha marcado de forma negativa una Semana Santa «muy complicada», en palabras de Herreras, que alteró sensiblemente los traslados procesionales de Jueves Santo y obligó a suspender la «Procesión de los Pasos» del Viernes Santo, lo que ha dejado en todas las cofradías y hermandades segovianas una sensación de «frustración compartida» por no poder salir a la calle con sus pasos.
«Sabíamos con antelación que las previsiones no eran buenas -explicó Herreras- y lamentablemente todos los pronósticos se cumplieron, por lo que únicamente hemos podido celebrar el Via Crucis de los Carmelitas del Miércoles Santo y la Procesión de Resurrección sin problemas».
El presidente de la Junta de Cofradías quiso agradecer la colaboración de la Policía Local, que ha sido «decisiva» para afrontar todas las situaciones que se han desarrollado durante estos días con la suspensión de la procesión del viernes y el traslado de los pasos que llegaron a la Catedral hasta sus respectivas parroquias. «En todo momento (la Policía Local) han mostrado su predisposición a colaborar en la organización de itinerarios para el regreso de las imágenes, favoreciendo que pudieran hacerlo de la forma más rápida y mejor para las cofradías,
lo cual es algo que hay que significar».
En cuanto a la protección de las imágenes, Herreras asegura que no puede plantearse un sistema homogéneo para todas, ya que cada pieza «reune unas características específicas que no permiten aplicar criterios comunes». «No nos podemos plantear montar protecciones rígidas porque no son fácilmente transportables en las carrozas -explicó- y por ello cada cofradía establece la mejor protección posible a través de envoltorios de plástico amoldados
a las características de sus imágenes».
Por otra parte, Herreras apoya la decisión de la directiva de la Cofradía de San Millán de no procesionar este año debido al mal tiempo, y asegura que este tipo de decisiones «deben tomarse siempre con desapasionamiento y con mucha frialdad, pensando siempre en la protección del valioso y querido patrimonio que atesoran». «Reconozco que es duro no salir porque sé el trabajo que hay detrás de la preparación de cada cofradía para participar en las procesiones -manifestó- pero en este caso creo que la decisión es correcta y el tiempo les ha dado la razón».
