Los ríos que pasan por Segovia mantienen su alto nivel de aportación, a pesar de que el volumen de lluvias ha descendido de forma notable. Gran parte de su elevado caudal se mantiene debido al agua embalsada.
El río Eresma, a su paso por Segovia capital, aporta casi 40 metros cúbicos por segundo, según la CHD. El Pantano del Pontón Alto, que está completamente lleno, vertía ayer por la tarde casi 20 metros cúbicos por segundo. En ese trayecto recibe las aportaciones del Ciguiñuela, entre otros afluentes. Cuando llega a la altura de Coca, el nivel era ayer por la tarde de 83 metros cúbicos. La tendencia es a la baja, pues, como ejemplo, en Coca, el volumen era el día anterior de 125 metros cúbicos. Pero ha llegado a aportar hasta 195 litros.
Otro río cuyas crecidas también han generado problemas es el Cega. A su paso por Aguilafuente llevaba ayer 20 metros cúbicos por segundo. El día anterior contabilizaba 26.
Y el Duratón vertía en Fuentidueña 16,5 metros cúbicos por segundo ayer. Ha llegado a soltar hasta 63 metros cúbicos la semana pasada.
En lo que se refiere al río Riaza, que abastece al mayor embalse de la provincia, el de Linares del Arroyo, soltaba ayer en ese punto 33,4 metros cúbicos por segundo, con tendencia a la baja. El pantano de Linares se encuentra al 90 por ciento de su capacidad, un nivel similar a los de Las Vencías y de Burgomillodo.
En lo que respecta a las carreteras, la situación se encuentra normalizada desde el pasado fin de semana, después de que hubiera más de 30 puntos con incidencias en la red provincial, y que tuvieron que ser cortadas puntualmente.
Mientras, continúan algunos problemas de suministro de agua potable en una pequeña parte de la provincia.
La crecida del río Cega había inundado los manantiales de Las Fuentes, entre Aguilafuente y Lastras de Cuéllar. De ahí se abastecen los municipios de Aguilafuente, Fuentepelayo, Aldea Real, Zarzuela del Pinar y Pinarnegrillo. Por ello los alcaldes tuvieron que emitir bandos prohibiendo el consumo del agua de grifo.
Posteriormente cada una de estas localidades ha buscado alternativas para normalizar la situación y devolver a los habitantes la posibilidad de consumir agua. En la mayoría de los casos se ha acudido a otros manantiales o sondeos antiguos, aunque no siempre los análisis han aportado parámetros saludables, dado que habían estado tiempo sin utilizarse y mantenían restos de lodos.
El Ayuntamiento de Aldea Real anunció ayer que las analíticas recibidas les permiten abastecerse del sondeo alternativo, por lo que han logrado normalizar el abastecimiento.