El pulso entre el alcalde Pedro Arahuetes y el portavoz del grupo Popular en el Ayuntamiento de Segovia Jesús Postigo aumenta en intensidad con la segunda sanción que el edil del PP recibe por su falta de asistencia a una reunión de un órgano municipal. Si la primera sanción obedeció a su falta de asistencia a una reunión de la Empresa Municipal de Vivienda (EVISEGO), el segundo expediente sancionador viene motivado por «no comunicar con la antelación necesaria» su ausencia en la mesa de contratación celebrada el pasado 3 de septiembre.
En el decreto que recoge el expediente sancionador-dictado por la concejala Claudia de Santos– se señala que el concejal del PP no argumentó suficientemente su ausencia en la mesa de contratación, señalando que su no presencia obedecía a una «cuestión de índole personal/mercantil surgida de forma súbita, habiendo intentado llamar sin que se recibiese la llamada en este ayuntamiento», conforme a lo que figura en uno de los párrafos del expediente.
La sanción conlleva una multa de 187,5 euros, cantidad que se sitúa en la primera mitad del baremo de cuantía de las sanciones, en atención a los agravantes o atenuantes existentes, y en este caso, el expediente asegura que en el incumplimiento de las obligaciones de Postigo como concejal que le hacen acreedor a la sanción «concurren atenuantes de falta de intencionalidad o reincidencia».
El alcalde Pedro Arahuetes informó sobre la sanción en su comparecencia ante los medios de comunicación tras la Junta de Gobierno, pero no precisó detalles sobre la misma, limitándose a dar cuenta de su tramitación en el orden del día de la Junta de Gobierno. Además, señaló que Postigo se encontraba presente en la Junta de Gobierno, y al preguntarle sobre su impresión, aseguró que el concejal popular «no dijo nada».
Seguramente, Postigo esperó unas horas para meditar su reacción ante la sanción, que hizo pública a través de una nota de prensa en la que expresó su intención de recurrir ante el tribunal contencioso administrativo la sanción impuesta; y aseguró que esta medida «es una más de la caza de brujas de Arahuetes contra mi, pero no me sorprende».
Postigo aseguró que «me consta que varios miembros de la corporación no han acudido a otras reuniones del ayuntamiento y el Alcalde, que es el proponente de las sanciones, no ha procedido, eso sí, contra mí si». Además, aseguró que el alcalde «tiene dos varas de medir y el problema es que no es que se le vea el plumero, es que ha pasado al descaro más absurdo. Por eso voy a agotar todas las vías legales de una sanción que considero injusta».
Asimismo, recordó que ya en una sanción similar hace un mes los tribunales le dieron la razón y fallaron en contra del ayuntamiento, y fue el ayuntamiento de Segovia el que tuvo que asumir las costas de una «nueva caza de brujas de Arahuetes a todo lo que suene a partido popular» y retirarle la sanción.
