Con José Mourinho aún lejos geográfica y mentalmente, el objetivo de Fernando Torres pasa por regresar dentro de nueve días a Maracaná para recordarle, en una final a todos y a sí mismo, que sigue siendo fundamental cuando la ‘roja’ se juega cosas grandes.
Aunque él asegure que no se olvida. «No creo que tenga que probar nada a los españoles sobre mi carrera. ¿Qué te parece?», le preguntó retóricamente a un periodista inglés que en la noche del pasado jueves quería saber si sus cuatro tantos a la debilísima Tahití le devolvían la confianza que aún no termina de tener.
«He disputado más de 100 partidos con la selección y he conseguido 35 tantos. No tengo nada que probar», insistió Torres sin dejar de sonreir tras el 10-0.
Ya tendrá tiempo para cambiar el gesto. Mourinho, el ‘viejo-nuevo’ entrenador del Chelsea, hizo días atrás unos comentarios sobre el madrileño que no fueron precisamente como para entusiasmar al delantero. «Hasta el momento ha estado así, así», indicó el luso. «Algunos esperarían más de él por su potencial y por lo que hizo antes, pero no lo ha hecho tan mal como muchos a veces tratan de hacer ver. Hay un equilibrio», agregó.
Mientras descifra las intenciones de su nuevo técnico, el ariete disfruta de la selección y del hecho de jugar en un país tan futbolero como es Brasil. «Ojalá volvamos para disputar la final. Es un privilegio jugar aquí. Los europeos no tenemos la oportunidad de venir a jugar en Maracaná todos los días», indicó.
«Todos nos hemos hecho fotos, las hemos enviado, ya tenemos un recuerdo más bonito, ojalá podamos volver y el recuerdo sea mejor», añadió el español, el único jugador en la historia en marcar goles en dos finales de la Eurocopa.
El haber anotado cuatro tantos en el renovado estadio de Río de Janeiro es algo que tendrá en su memoria «para toda la vida», pero antes de eso deberá ver si Vicente Del Bosque vuelve a apostar por él u opta por Roberto Soldado el domingo frente a Nigeria.
La opción por jugar con un ‘9’ está clara, y la pregunta pasa por quién, ya que Soldado rindió muy bien ante Uruguay, un partido incomparablemente más complejo que frente a Tahití. Pero Del Bosque ya ha demostrado más de una vez que es fiel a los hombres que han brillad en el equipo, algo que ya demostró en 2012 convocando para la Eurocopa a un Fernando Torres en horas bajas.
El de Fuenlabrada conoce muy bien a Nigeria, equipo que mañana se juega estar o no en semifinales, aunque la ventaja para llegar a esa instancia sea claramente de españoles y uruguayos. «Algunos son compañeros en el Chelsea y a otros los hemos visto en la Copa de África. Son fuertes y desequilibrantes en algunas posiciones. Con mucha experiencia y potencial físico, pero esperamos imponer nuestro juego», manifestó.
Y quiere jugar, claro. Espera que nadie se permita dudar de quién y qué es Fernando Torres para la selección española.
Por otro lado, el futuro de la ‘roja’ parece estar asegurado a largo plazo, según apuntaron ayer varios medios tras la victoria sobre Tahití. La prensa destacó el desempeño de los novatos y los suplentes que alineó Vicente del Bosque. Este triunfo se produjo apenas dos días después de que la sub’21 retuviera su corona continental.
«El presente y el futuro es maravilloso. Estamos dominando el mundo del fútbol y, probablemente, continuaremos haciéndolo», afirmó Radio Marca.
Las estrellas con las que España logró su tercer título en 15 años, son jugadores como Thiago, Martín Montoya, Marc Batra , Cristian Tello, Isco o Álvaro Morata.
Contra Tahití, el salmantino alineó a muchos jóvenes como Azpilicueta, Monreal y Mata, y solo puso a Sergio Ramos del equipo titular que venció a Uruguay.
Del Bosque fue recompensado con una exhibición viva de los nuevos y de las reservas que evidentemente querían impresionarlo. Ahora solo falta rematar la faena ante Nigeria.
«¿Te ha dado la depresión?»
Xavi Hernández desveló ayer en una entrevista que Del Bosque le convenció para no dejar la selección española. «Le dije que quería dejarlo y me preguntó: ¿Qué, te ha dado la depresión? Tú has de ir al Mundial de Brasil. ¿Cómo no vas a jugar allí?». El centrocampista del Barcelona elogió a su compañero Íker Casillas y habló de la situación que ha atravesado esta temporada en el Real Madrid. «He sufrido mucho por él, porque no se merecía el trato y le he visto muy tocado. Hemos hablado más que nunca. El problema no es que no haya jugado, lo grave son las declaraciones. ¿Cómo puede decir Mourinho que su error había sido no fichar un portero dos años antes? Igual no se acuerda, pero Íker les ganó la Copa en Valencia con tres paradas espectaculares», precisó. Además, también criticó al técnico portugués: «Le interesaba dividir. Y aquí estamos. Nos ha hecho más fuertes. Ha querido hacer daño, pero al final no lo ha conseguido porque hemos tenido mucha personalidad».
