Las zamarriegas hicieron frente ayer al frío, a la lluvia y al granizo para vivir con intensidad el día grande de la fiesta de Santa Águeda en el que se ensalzó el poder de la mujer, desde el hogar hasta el mundo empresarial.
La actriz Ana Duato fue una de las grandes protagonistas de la jornada que pasó acompañada de su hija María a la que, según explicó, “he contado la historia y el significado de esta fiesta”. Durante toda la mañana, la actriz, que en la serie ‘Cuéntame cómo pasó’ encarna a Mercedes Fernández de Alcántara, derrochó simpatía y atención con los admiradores que quisieron fotografiarse junto a ella.
Las alcaldesas de este año, las hermanas Alicia y Carmen Grande Velasco, hicieron entrega a Ana Duato del alfiler que la reconoce como ‘Matahombres de Oro’ de la fiesta de Santa Águeda de Zamarramala, un título que distingue a las personas o entidades que contribuyen a hacer aportaciones para las mujeres en general.
Desde el estrado de la plaza de Las Alcaldesas, Ana Duato dedicó el premio a todas las mujeres que, como su personaje televisivo, luchan contra el cáncer y lo superan. Dirigiéndose a las asistentes, declaró: “Sois vosotras las que me inspiráis en mi papel día a día porque dais vida a Mercedes con vuestra fuerza, con vuestra energía, con vuestra valentía de madres, de abuelas y ejerciendo como un pegamento en las familias”. Hacía así referencia a la capacidad de unir y de hacer tirar adelante a las familias unidas, que tienen las mujeres y sobre todo las madres impulsadas por el objetivo de “conseguir una vida mejor para sus hijos”.
En su intervención, que fue interrumpida por los aplausos del público, la actriz valenciana destacó el espíritu de superación y el deseo de ampliar la formación que mantiene constante en la serie la madre de los Alcántara y la lleva a acceder a nuevos ámbitos sociales y laborales. “Os invito —dijo a las zamarriegas— a coger el poder con ganas de cambiar el mundo de forma positiva. En nuestras casas, barrios o empresas podemos hacer grandes cosas”. Respecto a las novedades que trae esta temporada “Cuéntame”, serie que se emite en La 1 desde el año 2001, solo apuntó que “vamos a tener este año atrapado al espectador tanto como el año pasado, ya me lo diréis al final de la temporada”.
El director del Festival Internacional de Títeres, Titirimundi, Julio Michel, recogió el título honorífico de ‘Ome Bueno e Leal’ que, según proclamó “ha redimido a los titiriteros del limbo del desdén y les ensalza hasta el Olimpo del teatro, en el lugar que se merecen, al lado de los cómicos más grandes”. Julio Michel representó ayer en Zamarramala a la “coalición internacional de cómicos, saltimbanquis y marionetistas, nombrada Titirimundi” que todas las primaveras llega a Segovia y hace que en sus calles “triunfe, aunque sea de forma temporal, la utopía”.
“Que vuestro bastón de mando, queridas alcaldesas, sea esa varita mágica que devuelva la razón a los hombres” dijo Michel cerrando su discurso.
Todos los premios fueron entregados por las alcaldesas de las fiestas de Zamarramala 2013 Alicia y Carmen Grande Velasco, incluyendo los distintivos de alcaldesas honorarias y perpetuas otorgados a la subdelegada del Gobierno en Segovia, Pilar Sanz; las periodistas Reyes Santos (Cadena SER) y Patricia Martín (Radio Televisión Castilla y León) y la también periodista Marta Suárez, esposa del secretario de organización del PSOE y portavoz de este partido en las Cortes de Castilla y León, Óscar López, quien acompañó ayer a su mujer en los festejos. También hubo reconocimientos para las alcaldesinas Elena González Grande y Nieves Vaquero Grande y para las alcaldesas de 2012 María Fuencisla García Tejedor y Beatriz Fernández Gómez.
La Agrupación Coral Cuellarana, integrada por 38 voces mixtas, pregonó los encantos de la fiesta de Zamarramala cantando la Jota de las aguederas “El torrenillo” que ha creado y estrenado para esta ocasión. “Guapa, salerosa mujer zamarriega, de tu matahombres me quiero escapar. Con tus ojos negros quemas el pelele, tu boquita besa al bueno y leal”, dice el estrillo de la pieza cuya letra es obra de José Francisco Pinilla y la música de Jesús Pedro Ferreiro y Henar Montero. La coral repitió la jota, que gustó a los presentes, para acompañar el baile de las aguederas en torno al “pelele” que ardió en el centro de la plaza.
Vecinos y visitantes fueron después a degustar la tajada.