La UT 440.096, conocida como ‘la eterna azulona’, de la que se construyeron 225 ejemplares para servicios comerciales desde 1975, es la unidad en la que se trasladan los viajeros. Esta máquina fue preservada por el Museo del Ferrocarril de Madrid en el año 2010 y en la actualidad es la única de su serie que sigue en circulación.
La iniciativa fue impulsada el pasado año por la Asociación de Amigos del Ferrocarril de Madrid (AAFM), agrupación con 65 años de historia que tiene entre sus objetivos poner a disposición de la sociedad vehículos ferroviarios históricos restaurados. Para la puesta en marcha, emplea recursos propios y el trabajo altruista de sus socios. Cuenta además con la colaboración de Turismo de Segovia.
En 2012 casi 600 viajeros en tan sólo cinco circulaciones disfrutaron de los trayectos, que gozaron de una ocupación mayor al 70 por ciento de la capacidad del tren.
El ‘Río Eresma’, que tiene salida en la estación madrileña de Chamartín, cubre dos líneas, una entre la capital y Villalba de Guadarrama y otra, más espectacular por la belleza de sus paisajes, entre Villalba y Segovia.
