La Virgen de La Fuencisla vuelve a reinar en Segovia. Entre los últimos estertores del verano y las primeras hojas caídas de los árboles que señalan el inicio del otoño, la ciudad se entrega a su patrona en un impresionante ejercicio de devoción y religiosidad popular que un año más tuvo su primer capítulo en el recibimiento de la imagen de la patrona de Segovia donde miles de segovianos mostraron nuevamente su fervor y cariño.
El guión de los actos tuvo pocas diferencias con el de años anteriores. Desde temprana hora de la mañana, los de la Real Cofradía de Nuestra Señora de la Fuencisla se afanaban en el santuario en ultimar todos los detalles de la carroza que transporta la pequeña imagen de la virgen, vestida con delicadeza por las camareras con el manto blanco bordado en oro que la cofradía le ofreció en la década de los 60 y adornada con la ‘corona del centenario’ y la cruz pectoral del que fuera obispo de Segovia Luis Gutiérrez Martín.
A media tarde, y tras una misa solemne oficiada por el rector del Santuario Angel Miguel Alonso, la imagen de la virgen abandonaba su hogar para emprender el camino hacia la catedral, que durante los próximos diez días será su morada temporal. Durante el trayecto, muchos momentos de emoción en la comitiva, como el paso de la imagen bajo los arcos del Acueducto, donde ya la esperaban centenares de personas que vitorearon su llegada. Desde el Azoguejo, la comitiva enfiló por la Calle Real, y bajo el atrio de la iglesia de San Martín, la imagen se detuvo ante un pequeño altar instalado en uno de sus arcos con la imagen de San Alfonso Rodríguez. Allí, en nombre de la Real Cofradía, su presidente Julio Borreguero pronunció una breve oración y recordó la figura del santo segoviano en el cuarto centenario de su muerte, que se conmemora este año.
Cumpliendo puntualmente con el programa, la carroza con la virgen hacía su entrada en la Plaza Mayor a las 20,30 horas, recibida con la ‘Marcha de los Reyes Católicos’ interpretada por las dulzainas del Grupo La Esteva. Al llegar frente a la Casa Consistorial, la sección de alumnos de la Academia de Artillería cumplimentó a la patrona de Segovia, y fue recibida por el Cabildo Catedral cuyo dean José Antonio Alonso inciensó la imagen ante las autoridades locales y provinciales encabezadas por la presidenta de las Cortes de Castilla y León Silvia Clemente y la alcaldesa de Segovia Clara Luquero.
El grupo de danzas La Esteva interpretó una jota en honor a la virgen, que dio paso a la entrada de la imagen en la Catedral. La Fuencisla fue portada por la Via Sacra del altar mayor por las camareras de la virgen y entregada a los integrantes del Cuerpo de Bomberos, que la entronizaron en el lugar que ocupa habitualmente la imagen de Nuestra Señora de la Paz.
El obispo de Segovia, César Franco, fue el encargado de realizar el primer saludo a la patrona de Segovia, en el que quiso recordar a la cooperante segoviana de Cruz Roja Lorena Enebral, asesinada esta semana en Afganistán mientras atendía a personas con discapacidad. En su saludo también pidió la intercesión de la virgen para mitigar el dolor “de los que viven en el sufrimiento del cuerpo, de quienes no tienen trabajo, de los refugiados, de los perseguidos por causa de la justicia, de los que mueren cuando están buscando la libertad”.
Monseñor Franco aseguró que el dolor de las personas anónimas “es el que acapara la atención de María”, y pidió a los segovianos que estas fiestas sean “unas fiestas de fe en las que miremos a la virgen como símbolo de la verdadera iglesia de Jesucristo”.
El canto del himno a La Fuencisla puso el colofón a una nueva jornada para el recuerdo de todos aquellos segovianos que estos días dedicarán un momento para visitar a la virgen o participar en los actos religiosos que hoy dan comienzo.
