El jugador del Barcelona Leo Messi aseguró ayer que cree que el peor momento de la pasada temporada fue, sin duda, la enfermedad de su ya extécnico ‘culé’, Tito Vilanova, y su posterior recaída, aunque se mostró confiado en que el entrenador catalán «saldrá adelante y podrá superarlo».
«Tuvimos muchos tropiezos y cosas que nos afectaron, como las lesiones y otras cosas que fueron minando nuestra capacidad de reacción. También nos afectó muchísimo la enfermedad de Tito, aunque sabemos que saldrá adelante y podrá superarlo,», afirmó en una entrevista concedida a ‘Goal.com’, portal de la revista que le acaba de conceder el premio al mejor jugador del año. «Nosotros trabajamos todo el año para poder conseguir títulos a nivel colectivo, de club, y aunque no buscamos los premios individuales, cuando llegan nos dan un incentivo y más fuerza por continuar en la misma línea», afirmó al recibir el galardón.
Asimismo, el delantero argentino reconoció que fue una «temporada complicada», incluso a pesar de haber ganado la Liga. «El mejor momento del año fue sin duda cuando supimos que matemáticamente éramos campeones», apuntó al respecto.
Ante la próxima campaña, que el Barça encara con importantes cambios, como la llegada de su compatriota Tata Martino al banquillo azulgrana o el fichaje del brasileño Neymar, Messi admite estar «con mucha ilusión y optimismo». «La positividad es una de las claves del éxito», agregó.
Mientras, los jugadores internacionales del Barça que disputaron la final de la Copa Confederaciones se ejercitaron ayer a las órdenes del nuevo técnico Gerardo Martino en su segunda sesión tras regresar de vacaciones, exceptuando un Neymar que sí viajó con el equipo a Polonia para la disputa del tercer amistoso de la pretemporada contra el Lechia Gdansk. El técnico argentino contó, además, con la presencia de Mascherano, fuera de la convocatoria por decisión técnica.
Mientras que el resto de disponibles, incluido Leo Messi y Neymar, viajó a Polonia, el ‘Tata’ dejó el amistoso en manos del cuerpo técnico y se quedó o en la capital catalana, para conocer a sus jugadores cuanto antes y hacerse también a las instalaciones.
Por otro lado, los médicos azulgrana están preocupados por el peso de su fichaje ‘estrella’, Neymar. Según publicaron diversos medios, cuando el ariete pasó la revisión sanitaria del club, el responsable del departamento, Ricard Pruna admitió la necesidad de que ganara kilos en las siguientes semanas para poder adaptarse mejor a las exigencias del fútbol europeo. «Tenemos pocos datos para saber su peso ideal, pero parece que deberá aumentar su peso, 64,5 kilos son pocos para un jugador de 174 centímetros de estatura».
Los galenos barcelonistas idearon un plan físico para que Neymar ganara tres kilos durante las vacaciones. Sin embargo, la estrategia no ha dado resultado y la’ estrella’ brasileña llegó de sus días libres con el mismo peso: 64,5 kilos. Por ello, existe preocupación en el club e y ya se está trabajando en un proyecto individualizado que le permita ganar peso sin perder musculatura.
