Cuatro españoles sobrevivieron a la primera ronda del Open Castilla y León. Pablo Carreño, Gerard Granollers, José Checa y Roberto Ortega están entre dieciséis mejores del Villa de El Espinar, que hoy mismo comienzo a disputar las plazas de cuartos. También accedieron a la siguiente ronda el cabeza de serie número dos, Marius Copil, y el número tres, Andrey Golubev. La sorpresa del día la deparó el italiano Erik Crepaldi que, procedente de la fase previa , eliminó a su compatriota Flavio Cipolla, número cuatro del torneo, en dos sets.
La organización del torneo había dispuesto para la jornada de hoy una maratón de partidos, puesto que la mayoría de los jugadores no pudieron jugar el lunes, ya que acababan de llegar de disputar otros torneos. Así, en la pista central, desde las 10 de la mañana Gerard Granollers se las vio con el holandés Matwe Middelkoop, al que terminó doblegando en un encuentro algo irregular.
En la pista 1, el húngaro Marton Fucsovics se deshizo del británico David Rice tras un igualado primer parcial, y un fulgurante segundo. Quien decepcionó en su paso por El Espinar fue el brasileño Thiago Alves, que fuera subcampeón en la edición de 2008, pero que cedió ante Pierre Herbert con cierta facilidad por 6/3 y 6/2. Bien es cierto que Alves llegó lesionado al torneo, algo que se notó en su juego de fondo.
En el segundo turno de partidos, el rumano Copil, número 2 del cuadro, sentenció rápido ante el vallisoletano Ricardo Villacorta por 6/2 6/3. El kazajo Andrey Golubev, tercer preclasificado, hizo lo propio con el madrileño Enrique López Pérez por 6/3 y 7/5, mientras que la sorpresa del torneo saltó en la pista 2, la más próxima a la vía del tren, por la que pareció circular Erik Crepaldi. El jugador procedente de la previa salió triunfador del duelo fratricida italiano ante el cabeza de serie número 4, Flavio Cipolla, a quien apeó en dos sets, 7/6 (5) y 6/4.
Florent Serra, que comenzó perdiendo en la central ante el granadino Roberto Carballés por 6/4, pero recondujo el partido a base de veteranía y lo cerró con 6/3 y 6/4, apeando, de este modo, a una de las promesas del tenis español, que clasificó a su segundo representante en la figura del madrileño Roberto Ortega, que derrotó al ruso Mikhail Elgin, por 6/4 y 6/1 en apenas una hora.
De nuevo en la pista 2 saltaba otra de las sorpresas del día, con la derrota del bielorruso Uladzimir Ignatik, sexto cabeza de serie, que cedió en sendos tie-break ante el francés Maxime Teixeira.
Frente al griego Alexandros Jakupovic, que procedía de la previa, Pablo Carreño batalló hasta el final en un primer set de auténtica locura, en el que el tenista heleno se fue hasta el 5/1 con cierta comodidad. Pero el gijonés retomó el rumbo forzando el tie-break en el que no quiso más sorpresas, cerrándolo con un rotundo 7/1. Y esa fue la tónica en el segundo parcial, donde el español colocó un 6/3 en el marcador para alcanzar la ronda de octavos de final.
