Tras el empate de la Segoviana ante el Palencia, una de las personas más afectadas al finalizar el encuentro era el director deportivo del club, José Antonio Minguela, que aún confiaba en la mínima oportunidad de salvación que le hubiera concedido la victoria del domingo. Superado el disgusto, al que también contribuyó la actuación del árbitro, “que nos expulsó a dos jugadores en un partido que no tuvo una mala patada”, es momento de hacer balance de un año muy duro en la Segunda B.
La Segoviana ha primado esta temporada el apartado económico sobre el deportivo, y por ese lado escasas críticas se le pueden realizar a una Gestora que ha tratado de restar deuda en lugar de incrementarla elevando el potencial deportivo del equipo, “porque a mí me han ofrecido muy buenos jugadores por 3.000 euros al mes, y en todas las ocasiones les he dicho a sus representantes que no era viable la operación. Lo he lamentado, pero la prioridad pasaba por sanear bien el club, y si eso pasaba por tener un equipo de menos calidad, lo hemos aceptado con todas las consecuencias”.
Las consecuencias fueron que desde un principio el equipo se situó en la zona baja de la clasificación, con el entrenador cuestionado prácticamente desde el primer día. Minguela entiende la decisión de Maroto de no continuar al frente del equipo el año próximo, “porque este año ya lo ha pasado muy mal. Paco nos ofreció su dimisión varias veces esta temporada, pero no se la aceptamos porque ni teníamos claro que deportivamente fuera la solución para que el equipo fuera hacia arriba, ni en el apartado económico era demasiado viable”.
Ejemplos hay numerosos de conjuntos en los que las sustituciones a mitad de temporada no han sido precisamente un éxito, “y los más cercanos los tenemos en Lemona y Burgos”, señala Minguela, sabedor de que la situación económica de muchos clubes de Segunda B es casi desesperada, “y ya veremos dónde están algunos equipos el año próximo, porque no hay ni un euro y se debe mucho dinero”. La Segoviana debe, pero no tanto, “porque sabemos que la prioridad es sanear el club. En cuanto se consiga, podremos hablar de proyectos deportivos fuertes”.
